Reconozco que soy seguidor de los Delorean post-“Ayrton Senna”. Con ese pivotal EP, el cuarteto vasco pasó de parecerme un grupo aceptable con algún tema resultón a una banda que había dado con la tecla en cuanto a brillantez compositiva, calidad en la producción y, como suma de ambas, creación de un sonido reconocible; de clara proyección internacional en plena fiebre tropicalista y explotación de sonidos baleares, de los que fueron en parte responsables.
Tras el éxito internacional conseguido justamente con aquel disco y con “Subiza”, el grupo vuelve con «Apar», un quinto álbum que no se puede decir que se aparte demasiado de la senda del éxito, aunque sí que posee una cadencia menos eufórica y más sutil. Los ritmos sintéticos explosivos y el continuo éxtasis dan paso a una cierta relajación, más bien calma, como ya comprobamos en el primer adelanto, “Spirit”, que tras un comienzo propio de Kraftwerk da paso a un tema puramente Delorean dominado por los teclados de herencia noventera y la impasible voz de Ekhi, aunque sin caer de lleno en la obsesión dance de hace unas temporadas.
Hay una concepción más ‘de banda’ en este «Apar», como de vuelta a una etapa más indie-pop. Queda claro en canciones como “Dominion”, “Walk High” o “Inspire”, que sin perder del todo su vocación de baile poseen una clara estructura de pop clásico que aflora con más naturalidad que en su obra inmediatamente anterior. En “Destitute Time” insisten en esta orientación con la ayuda de Glasser a las voces, mientras que “You Know It’s Right” es el momento que más nos puede recordar a “Subiza” por su clara progresión expansiva y su uso de los coros femeninos.
Elemento este último de gran importancia en el álbum. De hecho, el momento más sorprendente lo encontramos en “Uphold”, con voz de Caroline Polachek de Chairlift, de clara afiliación dream pop, que marca un interesante camino por el que podría tirar el grupo en su siguiente trabajo. Finalmente, Erika Spring de Au Revoir Simone hace la segunda voz y canta en alguna estrofa de la preciosa “Still You”, colofón para un nuevo notable trabajo de los de Zarautz que, una vez más, nos hace sentir nostalgia por el verano ya pasado. Que vuelva pronto.