El intratable cuarteto de Villarobledo, Nerve Agent, regresa con un nuevo disco que comprime toda su esencia y lo aprendido en sus lanzamientos previos. Si el aún reciente EP nos presentaba una faceta más melódica de la banda, había expectación por ver si eso se reflejaba en un disco largo y cómo. Bueno, el largo no es tan largo, pero desde luego que lo nuevo de Nerve Agent gana cuerpo con melodías pegadizas y una mayor presencia de los riffs de guitarra sin que esto altere su esencia.
«Manual del Mangurrián» se compone de 10 temas que pasan como un suspiro y parecen una misma sesión, pero están llenos de estrofas graciosas, estribillos memorables y momentos de lanzar puños al aire como si te fuera la vida en ello. De hecho, todos los temas tienen ganchos tales que hacen que el debate de lo mejor del disco esté muy reñido. Destaca «Atraco a Frías», tan vitalista como su letra de echarse al vacío. En un mismo tema la banda es capaz de mostrar su lado más emocional sin dejar de lado imposibles juegos con el autotune, el drum n bass y la EDM. La faceta melódica también brilla en «Bacines», su particular y adictiva relectura de un tema de punk-rock a la Offspring en el que sustituyen el solo por un delicioso parche de electrónica de keygen.
Es indudable que la banda se acerca al rock y al metal, pero nunca resulta densa ni pesada, ni en los temas más abruptos. Es el caso de «FP (formación pafrontear)» que con su potentes bajos y su juego de scratches abre el disco como si fuera un remix de un tema de numetal. La presencia de riffs duros nos traerá el metal chandalero a la cabeza en otros temas como el himno ocioso «Finde», que también parece esconder un guiño en su solo a la banda crossover de moda Turnstile. Especialmente redonda es la mezcla de «Sadolio», un cruce entre Death Grips y Crystal Castles con letra descacharrante, aunque esta es una coletilla que puedo repetir para casi cada canción. Y es que la banda no relaja para nada su vena kinki: fiesta, peleas y delitos desfilan por las estrofas de 4 chavales que no son ni cantantes ni raperos en sentido estricto, pero cada vez tienen más tablas -personales y técnicas- para enganchar.
Y por si los 4 no estuvieran en suficiente estado de gracia, Adri de VVV (Trippin’ You) colabora en «Nótese Recordar» dejando la impronta de bakala oscuro empapado en DnB que protagonizaba «Vaciador» y a la vez encaja perfectamente en el disco. No en vano la precede «zapatero_hijas_typebeat.wav» con un salvaje tono de darkwave que va de la discoteca a los autos de choque y que a su vez podría haber estado perfectamente en un disco de los madrileños. Aunque por el lado más electro quizá lo más valiente es ese rompepistas techno que va sobre asustar «Puteros».
Tras un frenético viaje lleno de trompos que acaban bien, al final del disco parece que van a patinar, cuando Rodol se adentra en un terreno más confesional y se arriesga a cruzar rock alternativo con EDM. Pero «Espabila» acaba siendo un tema de «autoayuda» a su estilo callejero que resulta encantador e incluso cierra con unos nostálgicos acordes de guitarra emo que ponen el contrapunto ideal a un artefacto que te dará ganas de poner de nuevo una y otra vez.
Que al nuevo disco de Nerve Agent le hayamos puesto de etiquetas «electrónica, post-punk, metal alternativo» es ilustrativo de que la peculiar fórmula del cuarteto villarrobledense es cada vez más, simplemente «sonido Nerve Agent». Con esto conseguido, «Manual del Mangurrian» recoge en apenas 25 minutos una sucesión de 10 temas más orgánicos que nunca y con toda la explosividad bakala de siempre. Los Prodigy albaceteños, simplemente te peinan.
