/Reseñas///

Bloc Party – Intimacy

Bloc Party - Intimacy portada
PIAS, 2008
Productor: Jacknife Lee, Paul Epworth
Banda: Kele Okereke, Gordon Moakes, Russell Lissack, Matt Tong

Géneros: ,

7.2

La relación de Bloc Party con sus cambios de sonido y los fans es tortuosa. Fui el primero en que vaticinó que la banda sería incapaz de mejorar el propio sonido al que habían dado forma en «Silent Alarm». Reconozco que lo consiguieron en parte con «A Weekend in the City» haciendo lo mismo pero diferente. Poco después editarían como single «Flux», un tema en el que daban rienda suelta a su vena discotequera, tan entroncado con el sonido de Bloc Party como con aquel célebre «Do You Believe in Love?» de Cher.

El nuevo disco prometía más electrónica y fue presentado por «Mercury», una rareza que quedaba en algún sitio entre lo poco serio y la experimentación pasada de rosca. Unas escuchas más tarde y en el contexto del disco puedo afirmar que es un buen tema y con matices, pero eso no quita que tras el duro trago del seudohip-hop pasado por la batidora de Chemical Brothers («like the setting sun…») seguido de «Mercury», al oyente de Bloc Party se le ilumina la cara al escuchar el tono guitarrero y melódico de «Halo».

Y es que el resumen de «Intimacy» puede bien ser ese. El cuarteto ha cambiado un poco para conservar su licencia de seguir igual y no cansar en exceso a la parroquia indie. Con la crítica no sé si lo conseguirán, porque sus guiños ya comienzan a ser tics repetidos hasta la extenuación. Y es que por brillantes que sean la propia «Halo» o el triunfante electro-rock «One Month Off», esta última una especie de versión indie de Therapy?, en un concierto ya podríamos confundirlas con 3 o 4 temas de la banda por lo menos.

En estas tesituras, la sobresaturada de beats «Trojan Horse» aporta un aire un poco más fresco. Lo cierto es que el batería siempre me pareció junto al cantante, el motor de la banda. No sé en qué papel quedará ante tanto ritmo secuenciado, ya que hay temas de bases 100% electrónicos como «Zephyrus», un tanto pretenciosa y sin rumbo por otro lado. Y es que hay números que parecen hechos para disfrute de Okereke más que del oyente.
Por mucho que apelen a la electrónica y a la diversión, Bloc Party nunca han renunciado a ser un grupo sensible donde los haya. En este apartado claramente «Biko», con esos toscos ritmos r’n’b es incapaz de llegar a la altura de sus homólogas de los primeros discos, por mucho que el trabajo de producción y mezcla sea impecable (el remix discotequero se huele ya). Tampoco son nuevas las campanillas en la banda, pero nunca se habían acercado tanto al terreno de Depeche Mode como en «Signs».

Algo de ese tono retiene «Better Than Heaven», que sin embargo resulta uno de los temas más estimulantes del disco con esos sintes que resuenan en las paredes y donde por fin Kele alza la voz y se deja de jugar al indie moderno y hip-hop friendly. Total que el disco cierra con nota gracias también a «Ion Square» típica hasta la extenuación, pero siendo uno de esos temas con los que el ángel negro de la banda te levanta el espíritu.

¿Autoparódicos y sin rumbo? ¿Seguros de sí mismos y diferenciados del resto? Para gustos, lo que sí está claro es que «Intimacy» no les va a hacer perder su merecido trono en el indie británico. Eso sí, pese a su título este es un disco mucho más ruidoso que «A Weekend in the City», lo que hace pronosticar un rápido hueco en nuestra cabeza pero dificulta sus posibilidades de crecimiento, algo de lo que su segundo disco a la postre, iba sobrado.

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1 de enero de 2008