/Crónicas///

Pearl Jam – Madrid (07/09/2006)

E. Vedder, M. McCready, S. Gossard, J. Ament y M. Cameron
8.0
Palacio de los Deportes, Lleno
Precio: 40 €

Better Man
Corduroy
Animal
Big Wave
Rearviewmirror
In Hiding
Jeremy
Given To Fly
Once
Daughter (Another Brick In The Wall)
Not For You (Modern Girl)
Grievance
Why Go
Do The Evolution
Even Flow

Bises 1:
Severed Hand
Elderly Woman Behind The Counter In A Small Town
Man Of The Hour
Black

Bises 2:
World Wide Suicide
Go
Alive
Rockin’ In The Free World
Yellow Ledbetter
Little Wing

Hora y media en cubrir el trayecto Móstoles – Palacio Deportes, que para el que no esté ducho en asuntos madrileños, se suele cubrir en no más de veinticinco minutos, cortesía de las obras de Gallardón, que nos impidieron acercarnos a ver a los teloneros My Morning Jacket y malísima organización, que nos llevo a tener que acabar discutiendo con una pareja que había ocupado nuestros asientos, ya que nadie se ocupaba de informar al respecto, ni de mantener el orden en las gradas, que a cincuenta eurazos la entrada, pienso que era un mínimo exigible, no eran buen presagio.

Pero aún cabreado y con la lengua fuera, y ayudado por la maravilla que es el Palacio de los Deportes para acoger este tipo de conciertos, no pude reprimir las lagrimas iniciales que brotaron de mis ojos con el emotivo inicio del concierto dejando cantar al respetable el inicio de “Better Man”. Increíble como a cien metros del escenario, se escuchaba el sonido como si lo estuviésemos oyendo a través de la mesa de sonido y de apoteosis fue la primera andanada de cuatro temas, sin tiempo para el respiro, hasta “Rearviewmirror”. Aquí, como ya hicieron en San Sebastián en la gira de 2000, la jam-preparación previa al momento cumbre de la canción, con el saw things, se me hizo excesivamente larga. Sirva este punto, para citar uno de los pequeños borrones del concierto, que fueron unas jam excesivamente alargadas y forzadas, que Pearl Jam en su intento de hacer cada concierto único, metieron en Madrid. El tema de los distintos set list en cada concierto es genial, pero en demasiados puntos las partes instrumentales alargadas restaban ritmo al conjunto. Además, no se si tienen problemas con este tema en directo pero tanto en San Sebastián como aquí nos quedamos con la impresión de que el tema, pierde bastante en directo. El siguiente grupo de canciones no desmereció para nada al inicio, con un “Jeremy” que me volvió a hacer brotar las lágrimas, pero con un “Daughter”, absolutamente destrozado por las neuras de la banda hacia el presidente Bush. A mi, personalmente, no me aporta nada el escuchar un “Another Brick In The Wal”l a medias, alargando innecesariamente el final de uno de mis temas favoritos de la banda. “Not For You” también fue en la misma línea con la transición hacia “Modern Girl”, pero la traca final hasta “Even Flow», la viví con enorme intensidad nuevamente.

Los primeros bises también me volvieron a sacar un poco de punto. “Severed Hand” sonó perfecta, lo mismo que “Elderly Woman” con un Vedder sacando lo mejor de su voz, pero “Man Of The Tour”, no era el mejor tema para seguir tras “Elderly Woman…”. Incluso «Black», uno de mis temas favoritos, para cerrar el último grupo de bises no me pareció el más adecuado para levantar el ligero parón.

Los segundos bises ya volvieron a ser otra cosa, con un acertadísimo inicio con “World Wide Suicide” y “Go”, y el momento cumbre del concierto con un “Alive”, con un Eddie Vedder magnético y desbordante, moviéndose y saltando por todo el escenario, siendo más interesante que incluso la banda en el nuevamente alargado final, seguido por, ya con las luces encendidas, “Rockin’ In The Free World” de Mr. Young, que fue eso, una fiesta, con el “momento pandereta” de Eddie recogiendo y haciendo sonar las panderetas que le lanzaban los pipas, y repartiéndolas a las primeras filas. Para mi, sin dudarlo, este tema fue lo más grande del concierto y momento único e irrepetible de la multitud de conciertos, que soportan ya mis treinta y tantos años. “Yellow Ledbetter” pudo ser un apoteósico final, pero nuevamente se volvieron a salir por peteneras, aunque esta vez el sólo de McCready, si fue muy de agradecer.

En definitiva, grandísimo, irrepetible e imprescindible concierto de Pearl Jam, ante un público entregado totalmente (quizás de más porque a veces las voces impedían escuchar con claridad lo que realmente habíamos ido a escuchar), pero no pude evitar salir con un cierto halo de decepción porque no fue el concierto pluscuamperfecto que el precio y ver a mi banda favorita, hubiera pronosticado. Sirva decir que salí infinitamente más colmado en mis expectativas con las dos veces que he visto este año a otra de mis bandas de cabecera, Alice In Chains (especialmente en Festimad), a pesar de lo cicatero de la duración de sus conciertos, frente a las dos horas y cuarto de Pearl Jam. Espero que para cuando vuelvan a Madrid, bajen los precios (que va a ser que no, no nos engañemos, más bien todo lo contrario), que Bush pierda las elecciones y salgan más centrados en el tema musical que en el tema político y se inventen unas improvisaciones con algo más de chicha, porque de todo lo demás, de talento, de repertorio, de carisma, de saber tocar, andan bastante más que sobrados.

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7 de septiembre de 2006