No debería parecer raro que con una trayectoria como la de Nine Inch Nails, tengamos en España el increíble número de 5 fechas de la gira. Y no lo digo por que no haya fans suficientes para ver a Reznor y su nuevo reclutamiento, sino por que en vez de los conciertos íntimos (entrecomillado, puesto que hablamos de salas bien grandes) que nos ha tocado vivir uno esperaba más un frío show en un recinto más grande y de escaso guiño al fan acérrimo de la banda. Por suerte, nada de eso ha pasado.
|| ¡PO, PO, PO, PO! ||
Pero yendo por partes, es justo comenzar el comienzo de todo. Apertura de puertas bastante madrugadora que evitó la tan absurda cola que vemos concierto tras concierto. Así que, The PoPo, los teloneros, salieron a escena a la hora que debían sin demasiada dilación. Por aquel entonces La Riviera presentaba un semi vacío que hacía increíble el llenazo posterior que tuvimos. Esta banda de Pennsylvania compuesta por cuatro alocados miembros, nos saco a unos cuantos unos inevitables movimientos de cabeza y algún que otro ligero baile. Eso tampoco lo hace cualquiera. Y es que desde luego que esta banda muy al uso no es. Teclados saturados, batería sincopada, guitarras destartaladas y pintas estridentes tenían como fruto una especie de mezcla entre Rage Against The Machine o System Of A Down con unos Franz Ferdinand más bailones o unos !!! con algo más de teclado de por medio. Sacan disco ahora, así que habrá que seguirles la pista (terminaron chillando ¡Po, Po, Po, Po! buena parte de publico).
| ESPIRAL ROTA |
El recinto se comenzó a llenar en cuanto se empezó a descubrir el escenario de Reznor y los suyos. Los que estábamos abajo más bien hacia delante veíamos correr peligro nuestras posiciones, pero la verdad que durante todo el concierto se respiró un aroma de tranquilidad sin demasiada gente molesta que hace que uno aún tenga fé en los conciertos medianos/grandes. Eso sí, el calor se empezó a poner insoportable justo cuando una niebla espesa nos inundó a todos los ojos mientras sonaba algo parecido a una versión alargada de «Pinion». Cuando la niebla desapareció, vimos las siluetas de la banda (impresionante la puesta en escena elegante y sencilla de los focos) que directamente desataron la locura con el inevitable «Wish». El ambiente se torno en simplemente perfecto, en esta primera visita de Nine Inch Nails a la capital de España, precisamente sonando una canción de hace 15 años.
Después, como pasó con casi todos los momentos del «With Teeth», se bajaron los ánimos con «The Collector». Pero solo fue hasta la siguiente parte que tuvimos de «With Teeth». Y es que la primera sorpresa de la noche nos llegó oyendo las primeras notas de teclado de «Heresy», probablemente de los momentos más emotivos de la noche. Después una siempre perfecta «Terrible Lie» que unieron con otro guiño perfecto al «The Downward Spiral» de la mano de «Piggy», en la que se bajó entre las primeras filas durante buena parte de la canción, para terminar lanzando (literalmente) el micrófono hacia el publico para que algún intrépido hiciera su trabajo y cantara alguna que otra estrofa. Para cerrar el bloque que más impresionados nos dejó, tuvimos una magistral y celebrada «Closer» y una poco esperada «The Becoming», volviéndonos a dejar claro que aquella noche iba a ser la del «The Downward Spiral».
Posteriormente, el «With Teeth» nos volvió a dejar muy fríos y ni siquiera «Even Deeper» o «Help Me I Am In Hell» fue la misma tras «Love Is Not Enough». Por suerte, la progresiva «Eraser» nos sacó del hastió poco a poco hasta que Reznor terminó inundando con ruido esta céntrica sala madrileña. Después, «Reptile» nos hizo continuar en 1994 como antecesor perfecto de (a gusto personal) el momento de la noche: «The Fragile», interpretada al piano por Reznor en su comienzo para terminar erizándonos los pelos en la parte final ya con toda la banda. Impecable.
Para la siguiente vez, tuvimos de nuevo una vuelta al «With Teeth» pero esta vez repasando algunos de los mejores temas, «Only» y «You Know What You Are» que esta vez estuvieron a la altura de las circunstancias. Y si antes tuvimos momentos «Downward Spiral» por doquier, los momentos «Broken» estuvieron presentes en todo momento como desmostraron «Suck» y la siempre cañera «Gave Up», interpretada por la banda actualmente de una manera inusitada (otro de los mejores momentos).
Y como todo lo bueno acaba, nos llegó la clásica recta final de sus shows: Primero «Hurt» que quedó un tanto ridícula en cuanto a emotividad al lado de la anterior «The Fragile», y la pareja de canciones 10 que son «Hand That Feeds You» primero y el clásico «Head Like A Hole» para cerrar. Colofón perfecto, sobre todo cuando Aaron el guitarrista actual se subió a la barra de bar junto al escenario y rompió su guitarra por la mitad.
| UN TOUR PARA LOS FANS |
Este tour de Nine Inch Nails (aparte de los muchos que creara) es una verdadera muestra de cariño del propio Reznor a sus seguidores. Algo que es de agradecer y que encumbra a la NIN a un puesto con sus directos que hoy en día pocos pueden decir: cambios de set list constantes y día a día, actualización diaria de su web con fotos de las ciudades que pisan, dejar pasar a fans a ver la prueba de sonido (como paso esa misma mañana)… Definitivamente, una gira verdaderamente única que sirve como repaso para una trayectoria envidiable con una multitud envidiable de detalles y guiños más aptos para el fan de verdad que para el que no tiene más que un par de discos.
