(lo:muêso) siempre han sido una banda que ha ido muy a lo suyo, una de esas bandas que disfruta con la música de forma notable sin que esto signifique que lo suyo se quede en el campo de lo amateur o la autocomplacencia. En esta ocasión y como continuación a su tercer disco largo se han decantado por editar cuatro nuevos temas en un EP dando nuevas muestras de su personalidad musical. Y es que los cuatro temas con sus diferencias, suenan a los barceloneses por los cuatro costados.
«Triangle de Tartaglia» abre en clave de oscura atmósfera y aires post-rockeros que finalmente potencian ese tono desesperado a través de las voces gritonas, herencia del post-hardcore. Da paso a «Wet» con sus golpes de batería a piñón y el ruido juguetón de bajo y guitarras por encima, con esa mezcla de melodías algo atonales y mucho nervio del indie más rockero.
«ê» si que nos sorprende más con unas voces sintetizadas y aun aire instrumental etéreo, para que finalmente «Jurelculebra» ponga el punto final con el toque punk-rock que parecía que se iba echando en falta. Aquí incluso es algo más proclive al hardcore melódico de lo que otras veces les hemos escuchado, aunque siempre con esa urgencia angulosa al acecho y ese rastro ruidoso que van dejando. En definitiva, cierran el ciclo sin decepcionar consiguiendo así un equilibrio perfecto en sus diferentes facetas o una muestra de versatilidad sin renunciar a su personalidad.
Puede que en «Palindromê» la banda no innove demasiado, pero seguro que a quienes conectaron con su propuesta en los anteriores discos, sigue conquistando. En ese punto me encuentro yo también, aunque sabe a muy poco y eso es una pequeña faena que nos hacen. Esperemos que el próximo largo no se haga demasiado esperar, aunque si esta edición los lleva de gira a nuestras proximidades, nos damos por satisfechos.
