Si bien J Mascis a lo largo de su carrera nos ha demostrado que, pese a haber alcanzado con Dinosaur Jr. un sonido muy personal, sabe desmarcarse de él (en proyectos como Witch por ejemplo), con este disco en solitario prescindiendo de su banda The Fog, se decide a tirar por el mismo sonido de su banda madre en sus últimas entregas.
No es algo que esconda un disco con el título pintado en los verde y morado tan típicos de la banda y con una portada del mismo estilo, aunque notablemente mejor, que la de «Farm». Y si, la tónica musical es muy similar a la que nos dejaría un «Farm» desprovisto de electricidad; ese indie con tintes folk, casi siempre ahogado en la melancolía de la garganta de Mascis.
Dentro de ese tono, que no hace el disco apto para depresivos (la mejor muestra «Can I»), encontramos sin embargo algo de optimismo en «Listen To Me» y mucha belleza sugerida en «Several Shades of Why», con un magnífico cello. Y es que lo que podría haber resultado un conjunto monótono en cuanto a temática y sonido, lo combate con la personalidad que imprime a cada canción, en ocasiones a base de exquisitos arreglos, como los de la dubitativa «Very Nervous and Love» o la evolvente «Make It Right».
Si algo aporta este álbum es un toque ligeramente más americanista. Curioso que sea gente de Band of Horses la que ayuda con coros por ejemplo en «Not Enough», siendo Dinosaur Jr. una influencia tan notable en los indie-folkers. «Where Are You» traza similares cauces, exponiendo la perfecta adaptación del indie-rock al folk. Y, como si fuera por llevar la contraria respecto a la costumbre de cerrar discos eléctricos con una lenta, el guitarrista de blanca melena termina con la canción más rockera del repertorio, haciendo gala no sólo de electricidad sino también de distorsión.
«Several Shades of Why» está lejos de ser un disco para fans irredentos o algo menor. Nos sorprende a estas alturas el talento compositivo de un Mascis capaz de firmar discos tan relevantes con su banda y todavía sacar material para un disco en solitario de este calado. Cierto es que no nos presenta nada nuevo, pero joyas tan simples y directas como «Is It Done» o «Too Deep» no se escuchan todos los días.