/Reseñas///

Half Foot Outside – Heavenly

Half Foot Outside - Heavenly portada
Limbo Starr, 2008
Productor: Kaki Arkarazo, Hans Kruger, John Agnello
Banda: Carlos Leoz, Israel Medina, Brian Hunt, Edu Ugarte

Géneros: ,

8.5

Cuando un grupo nos acostumbra mal para bien, curiosa paradoja, surgen los miedos, los reparos, los «listones demasiado altos», los «no creo que superen su último disco». Esto pensaba yo de Half Foot Outside, que siendo ya una de las más longevas bandas del indie-rock nacional, lanzaron en 2006 un colosal «Perfect From the Distance» que hizo las delicias de amantes del género que tantas alegrías dio en los Estados Unidos de los últimos 80 y primeros 90.

La primera y sucesivas escuchas nos dejarán ben sabor y el infeccioso coro de «Driveways» en la cabeza, algo de lo que aún no me he recuperado. Sus dos minutos y medio son lo más perfecto que he escuchado este año, de corazón lo digo. Unas pocas más sumarán la inicial «The Floating Spaceboy» a este fervor, con lo que ya suman dos éxitos memorables. Sus méritos, pues más o menos los de siempre, guitarras a lo Dinosaur Jr., voces que van de Superchunk a terrenos dulces y un tono más melódico y power-pop que puede ser el aroma que todo un Jon Auer ha dejado en el disco. Pero tampoco pongamos su nombre en letras muy grandes, el cuarteto ha demostrado ya saber hacer lo suyo bien sin ayuda de nadie.

En su mayor búsqueda de la perfección melódica la banda consigue también combinar con tino la aspereza del indie-rock con la épica en los fondos más barrocos de lo normal de «Thin Skin Heavy Bones» y «We’re Taping Phonelines». La banda también incorpora teclados que son una delicia en «Joy of Youth» o «In Pieces». Buenas canciones, sin duda, pero que apuntan a la única debilidad del disco, excesiva saturación y perfección melódica. Puede sonar raro, pero es una grandilocuencia pop que apabulla.
El momento más relajado y pop si que está mediatizado por Jon Auer, hablamos de «Unsafe at any speed», que bién podría ser un tema de Posies. Mucho mejor lo hacen de nuevo con coros surferos de «Keep the Beat» y también hay que decir que continúa siendo notable la evolución de Carlos Leoz como cantante. Para el final se dejan la estimulante estampida de psicodelia noise de «Getting Into the Sound», «Time and Space» que viene a ser el tema con más garra de todo el disco e incluso un bonus track a lo Sonic Youth que no es para desperdiciar.

No me atrevería a decir que «Heavenly» supera realmente a su antecesor, pero sí que la banda consigue un resultado cercano sin repetirse. En otras palabras, afianza lo conseguido desarrollando una personalidad propia que si bien sigue teniendo ciertos referentes extranjeros, se desmarca de otras propuestas que puedan hacerse en España. Y no será porque no cuenten entre sus amigos y fans a gente de Los Planetas o La Habitación Roja, que figuran en los créditos del disco.

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1 de enero de 2008