/Reseñas///

Dirty Projectors – Swing Lo Magellan

Dirty Projectors - Swing Lo Magellan portada
Domino Records, 2012
Productor: Dave Longstreth
Banda: Dave Longstreth, Amber Coffman, Nat Baldwin, Brian McOmber y Haley Dekle

Géneros: , ,

8.7

Que la cabeza de Dave Longstreth, el director de orquesta y compositor que decide en Dirty Projectors, va muchos pasos antes que la de la mayoría de su generación musical es algo que ya ha quedado demostrado del todo. Tras diez años ya escondiéndose tras el nombre de su cambiante banda parece seguir empeñado en investigar en su sonido, en ahondar en la tradición para crear algo nuevo y sobre todo único. Una de esas cosas que deberían permanecer en el recuerdo de todos a lo largo de los años, aunque sólo fuera por lo único de su propuesta.

En «Swing Lo Magellan» volvemos a encontrar un sonido propio, aún con un comienzo muy en la línea de «Bitte Orca» con «Offspring Are Blank», «About To Die» y «Gun Has No Trigger» la paleta de colores continúa aumentándose. Está claro que cada vez queda menos de esos destartalados sonidos previos a la obsesión de Dave por incluir coros y armonías femeninas, pero en «Swing Lo Magellan» se abren unos pasadizos muy amplios dónde ahora si entra el folk y el pop más clásico («Swing Lo Magellan», «Irresponsable Tune» y «Impregnable Question», por ejemplo), el rock psicodélico («Maybe That Was It»), la multitud de arreglos de «Unto Caesar» y un inacabable registro de canciones trepidantes en ritmo y sonidos en el juego de guitarras y palmas en «Just From Chervon» y «Dance For You» o en el uso de samplers electrónicos en «She What She Seeing» y «The Socialities».

Alguna de las premisas que Dave ha ido ganando con los discos si se mantienen. La presencia vocal femenina es una vez más clave, en un uso sensacional de las voces de Haley y Amber, ya que se han enfrentado a la pérdida de Angel Deradoorian como miembro del trío femenino de manera temporal. Amber Coffman así queda como auténtica líder en temas como «The Socialities» o en el juego vocal con Dave en «Unto Caesar». Igualmente se han enfrentado a una base rítmica que ha cambiado con el fichaje de  Michael Johnson a la batería, bien arropado por el impredeciblemente preciso bajo de Nat Baldwin (sin duda Dave sabe que esos cambios de ritmo no serían igual sin él).

Otro paso al frente de la banda neoyorquina con un Dave tan brillante y experimental como siempre, aunque con una colección de canciones bastante inferior de esa obra maestra que es «Bitte Orca». No es cuestión de inspiración ni de ejercicio de estilo puesto que siguen siendo únicos y sonando a ellos mismos, pero hablamos de un conjunto es menos excitante y menos redondo. Y si, me sumo a la lista de gente que no sabe describir a que suenan Dirty Projectors.

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1 de enero de 2012