No dejan de salir discos, oye. Y no todos buenos, esto es lo que nos trae el liberalismo. Así que nada, vamos con un nuevo repaso a discos notorios que han salido últimamente, que no se diga que Bono saca disco solo para ser top del año en la Rolling Stone (broma verídica, chequenlo güeys).
Godflesh – Post Self
Uno hubiera dicho que el disco de reunión de Godflesh, mostrando la fuerza bruta del dúo tantos años después era todo lo que había por decir, que no estaba mal. Pero «Post Self» le gana por buen palmo buceando en los Godflesh del reino de los sueños (o las pesadillas), de los matices sintéticos y las melodías maquinales.
8
U2 – Songs of Experience
Quitando lo lamentable de retrasar un disco para meterle unas soflamas anti-Trump mientras te guardas la pasta en paraisos fiscales, todos sabemos la broma que son U2 desde hace ya un par de décadas. Pero es una broma apagada, una en la que nos reímos del Bono del Muchachada Nui, porque el real y su música no nos dan ni frío ni calor. En este contexto, ver a U2 intentando ponerse a la altura de Coldplay, The Killers o Imagine Dragons como si fueran millenials carrozas y no carrozas a secas, resulta entrañable. Dentro de lo malo, mejor esto a que intenten hacer sin el más mínimo éxito otra «Where the Streets Have No Name», que era a lo que jugaban antes.
5
Quicksand – Interiors
El retorno de la banda de culto posthardcore no eclipsa a nadie y quizá hasta decepcione a los fans de su vertiente más dura con sus claros contoneos hacia el terreno de Rival Schools. Pero Walter Schreiffels sigue demostrándose como compositor de excelente clase. Más que aplastante o eufórico, «Interiors» es un disco con un regusto reflexivo y amargo.
7.5
Berri Txarrak – Infrasoinuak
Desde el heavy metal más borroka de sus inicios a las tentativas indies pasando por un glorioso reinado en el rock alternativo estatal, Berri Txarrak han hecho de todo, pero sin renunciar a su corazón. Eso es «Infrasoinuak», un disco tan Weezer o más que nunca en el que fuerzan algún retazo de punk y metal pero en el que las melodías prevalecen. Hermano edulcorado del «Jaio.Musika.Hil», es cierto que resulta algo soso tras la ambición de su polígrafo, pero en el fondo es una reivindicación de la banda sencilla y por ello querida, que son.
7.5
Björk – Utopia
Björk abrió un camino en el pop experimental del que muchos se han beneficiado, como su pupilo y actual productor Arca. La islandesa es capaz de mucho con su personalidad y su gusto, pero no acepta que el momento de ser vanguardia pasó hace tiempo. «Utopia» es un nuevo ejercicio de electrónica líquida, estructuras deconstruidas y pop preciosista que acierta más cuanto más se acerca a lo convencional. Bonito, sí. Cansino, también. Björk, si no puedes hacer ya vanguardia, haz pop y déjate de hostias.
6
Glassjaw – Material Control
La banda favorita de los numetaleros que quisieron molar más que el resto ha vuelto. Pero vamos que Daryl Palumbo no es Mike Patton así que no fliparse con las expectativas. El tercer disco de los de Long Island viene más trallero de lo esperado pero racionando mucho las melodías que hacían de su caos algo hermoso. Buen retorno pero tras tanto tiempo algo más curradito no hubiera estado mal.
7