/Crónicas///

Territorios Sevilla – Sevilla (05/06/2010)

7.2
Monasterio de La Cartuja,
Precio: 20 €

El hip hop también atrajo a mucha gente a la Cartuja, pero de una media de edad bastante inferior a la del día anterior. Si el Viernes podías encontrar a gente de treinta y cuarenta años, al día siguiente la norma se encontraba en los veintipocos. Y es que por doquier pululaban chavalillos, algunos de quince años o menos, para muchos de los cuáles seguro que aquella era su primera experiencia en directo

DOGMA CREW

Bastantes se concentraron en el Cruzcampo antes de las doce, haciendo del de Dogma Crew el concierto que más chavalada atrajo de todo Territorios 2010. El escenario mediano estaba lleno para ver a Legendario, Puto Largo y compañía despachar su hardcore rap; se nota que los de Mairena del Aljarafe siguen siendo uno de los grandes nombres del hip-hop de la zona. Durante el rato que estuvimos viéndolos no dieron cuartel: escupían sus letras a piñón fijo y con bastante agresividad, aspecto que les ha valido más de una crítica desde sus inicios, pero que satisfizo enormemente a sus numerosos fans. La anécdota la puso una gran pelota hinchable promocional de la marca de cerveza, que estuvo votando entre el público hasta que cayó al otro lado de un muro, con el consabido lamento de los espectadores, aunque no sería la última vez que la veríamos. Daba igual, el concierto seguía, aunque nosotros prefirimos al rato cambiar de escenario, y de pasada oír más que ver terminar a un Morodo que abarrotaba por su parte el escenario principal.  

PUBLIC ENEMY

Y por fin llegó, probablemente la que era piedra fuerte del Territorios de este año. Ya con el despliegue de la bandera se oyeron los primeros vítores, y no era para menos: Chuck D, Flavor Flav y compañía son quizá la máxima leyenda del hip-hop a nivel mundial, y su visita no era algo que ocurriese todos los días, y menos en Sevilla. Muchas camisetas, sobre todo de parte de los más veteranos, que eran los que los esperaban con más ilusión. Se olía a hito en Sevilla, y lo que vino después así lo demostró. Luces apagadas, silencio momentáneo, el sonido de una ametralladora, y unos alaridos que anunciaban ‘Sevilla, are you ready for Chuck D/Flavor Flav?’ para seguidamente dar comienzo al espectáculo. Tras DJ Lord, una banda de directo al completo (poco frecuente en el hip hop actual) y dos miembros de la S1W, los dos colegas aparecían en el escenario como una tromba. Y digo una tromba porque estos cincuentones (D casi casi, y Flav en asombrosa forma a sus cincuenta y una primaveras), enlazaron clásico tras clásico, centrándose con acierto en ‘Fear of a Black Planet’ y, evidentemente, en ‘It Takes a Nation of Millions to Hold Us Back’; piezas claves del género, insuperables aún para un gran número de entendidos.

Con un teatrillo/escena preparado casi para cada tema, sobre el Tres Cultura hubo de casi todo: gueto blasters, bailes militares, solos de guitarra, heavy metal, niños (¿el hijo de alguno de los protagonistas?), la Flav Dance, regalos al público… Cayeron las que tenían que caer, cosa que hizo desatar la histeria entre algún die-hard fan del público: Welcome to the Terrordome, Bring the Noise, Don’t Believe the Hype, Can’t Do Nuttin’ for Ya, Man, Fight the Power, Public Enemy Nº 1… Sorprendieron con una Terminator X to the Edge of Panic, en directo por primera vez en un par de años, según aunció Chuck, y con una  By the Time I Get to Arizona, dedicada con un efusivo ‘fuck you’ a la controvertida nueva ley de inmigración de tal estado. Incluso las dos cabezas visibles de la formación se marcaron un insólito dúo: D rapeando a capella y Flav siguiéndolo ¡a la batería! Y hay que reconocer que se manejaba bastante bien con las baquetas.

Finalmente, tras hora y media de uno de los más grandes shows que se hayan visto en la capital hispalense en los últimos tiempos, la cosa terminó con un discurso final por la paz por parte de Flav que se vio un poco desvirtuado por un aviso por megafonía anunciando que ‘el grupo vendía camisetas’. World in Peace sí, pero también hay que mantener el negocio.

CHACHO BRODAS Y FLAKO

Nos fuimos entonces al Cruzcampo a ver qué tenían que ofrecer Chacho Brodas. Poco que decir. Su mezcla de hip-hop y dubstep parecía no llamar demasiado la atención del público. Al poco nos marchamos al jardín que albergaba el escenario CAAC, donde el chileno Flako intentaba poner en pie al escaso personal (acababa de empezar) con su sesión dub, pero lamentablemente en esos momentos sólo conseguía poner algo de ambiente a esa especie de ‘zona de resaca’ del concierto de los Public. Igual luego la cosa se animaría, pero eso ya no los vimos porque nos fuimos a ver (mis compañeros por enésima vez) a los triunfadores morales y de corazón de la noche.  

SFDK

Lo de SFDK olía a triunfo desde que salieron los horarios y distribución de grupos por internet. Últimos en tocar en el Tres Culturas, tras los mismísimos Public Enemy, en el festival más importante de la ciudad que los vio nacer, en la que son algo así como los héroes del hip hop, y a la cual está atada gran parte de su música y alma. SFDK tenían la batalla ganada desde el principio, lo sabían, y no necesitaban ningún tipo de artificio para competir con el barroquismo de los neoyorquinos. Sólo carisma, humildad y buen flow. Zatu salió a un escenario totalmente carente de artificios salvo la mesa de Acción Sánchez, acompañado en esta ocasión por Legendario de Dogma Crew como segunda voz, que repetía por segunda vez sobre las tablas aquella noche. Y con su más reciente single, que indicaba a la perfección su relación con su ciudad, S.E.V.I.L.L.A., empezó un concierto  en el que poco tenían que demostrar a estas alturas. Alternando temas de su reciente Siempre fuertes 2 con clásicos como Rap romántico, En la oscuridad o la siempre esperada Dónde está Wifly!, se sabían ganadores y arropados por su público, pudiendo así quedarse con el personal parando la música para decir que tenían un problema interno del grupo y tenían que irse, o que el público no estaba lo suficientemente entregado y que pasaban de seguir. Naturalmente, son bromas frecuentes en un concierto de estos sevillanos, con las que de hecho consiguieron más complicidad con la gente si cabe. Al final, satisfacción tanto entre los más jóvenes, que estaban viendo a sus ídolos, como entre los fans de toda la vida, que se alegraron sobre todo por la profusión de temas de toda su carrera.

GRIFFI & DJ 2D2

Cuando parecía que la fiesta iba a seguir, con una suerte de improvisación entre los dos Mcs y el DJ, nos marchamos ya satisfechos de nuevo al Cruzcampo, para ver la a Griffi (repitiendo tras Chacho Brodas) & DJ 2D2. La sesión del Sólo los Solo y el reputado pinchadiscos cerraba la noche, y estuvimos un rato bailando con sus ritmos funk, soul y, evidentemente, hip hop. Fue entonces cuando volvió a aparecer la pelota, ya casi desinflada, que alguien había ido a buscar, y que se arrastró y voló a patadas, cayendo sobre la gente y molestando. Nos pareció ya todo bastante decadente y decidimos marcharnos. Eran casi las cinco y había una larga crónica que escribir. 

Nos vemos en Territorios 2011, esperando que sea al menos igual que el de este año.

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5 de junio de 2010