Hacia tiempo de mi última visita a La Cubierta de Leganés… quizás desde Incubus hará 2 años fácilmente. Poco se usa ya la «multiusos de Madrid Sur» debido a su sonido, su escasa capacidad, la competencia de su vecina Plaza de Toros de Vistalegre y aparte sobre todo su antigüedad. Justo el día antes a esta primera cita de la edición «indoor», Korn estuvo tocando junto a Kannon y los teloneros por excelencia, XXL. Según hable con un colega asistente a dicho concierto, aunque el techo permaneció cerrado, el sonido fue mejor de lo esperado en este recinto que muchos conocen bajo el nombre de «La Cúpula del Trueno» (en nombre de su pésima calidad de sonido).
Debido a que la organización de Festimad no dejaba pasar ni comida ni bebida (ni agua) decidimos no entrar hasta poco antes de que diera comienzo Deftones. Y eso fue lo que la mayoría de gente hizo, una verdadera pena para los que nos perdimos a los grupos anteriores (en mi caso, me hubiera gustado ver a Nacen De Las Cenizas y Virgen) y sobre todo para las propias bandas que afrontaban estas actuaciones con muchísima ilusión y se toparon con un recinto completamente vació.
Entre Virgen y Deftones entramos al recinto, se formó cola pero luego dentro la verdad que aun veíamos todo bastante vació. Parece que aunque se vieran muchas camisetas de ellos rondando, han perdido mucho poder de atracción. Eso, y que al igual que pasa con Tool mucha gente de fuera de Madrid prefirió hacerse mejor un viajecito a Barcelona a verles en una sala en condiciones (Y además, por lo que dicen menuda diferencia de concierto entre el de Madrid y el de Barcelona).
El sonido de La Cubierta fue tan lamentable como siempre, desde la primerísimo nota. De nada sirvió la apertura de la mitad del techo de la Plaza de Toros, el concierto de Deftones retumbo por todos los recovecos. El sonido rebotaba como en los mejores tiempos del recinto, y los de Chino Moreno no ayudaban a hacer que nada sonara mejor. Sobre todo el propio cantante, que se pasó la hora y algo de concierto emitiendo sonidos continuamente. De nada sirvió que se marcaran un mas que aceptable set list, ya que aquello no tenia solución.
La gente vivió mucho el concierto y hubo golpes varios entre el publico y de todo lo que se precie… hasta Chino se mostró completamente desbocado como el buen front man que es cuando quiere. Así fueron cayendo temas y como «Korea», «My Own Summer» o la nueva «Beware The Water» para comenzar. Muy enérgicas las versiones que posteriormente sonaron de «Feiticeira» y «Be Quiet and Drive”, pero en este caso (y sin que sirva de precedente) nos quedamos con las version en disco. Siguieron cayendo temazos con especial mención a «Digital Bath», «Around The Fur» o la ya tradicional «Change (In The House Of Flies)» con Chino a la guitarra.
El propio Chino junto al bajista de la banda Chi, demostraron estar de bastante «buen rollo» con el público, lo que hizo que la gente se lo pasara muy bien a pesar del malísimo sonido de la banda y de los berridos que emitía sin sentido alguno su enorme (sobre todo por el tamaño) cantante.
Para finalizar eligieron bien lo que tocar, pues a pesar de que no fuera el mejor concierto de mi vida, he de reconocer que el final del show fue muy bien seleccionado. Primero la magnifica «7 Words» pasada por la trituradora de Chino. En medio de la canción pararon de tocar para tocar otro temazo, «Engine Nº9». Posteriormente, volvieron a la segunda parte de «7 Words», no sin antes hacer un guiño al estribillo de «Wicked». Un medley bien pensado, pero mal ejecutado. Para acabar del todo el concierto, no consiguieron mejorar el medley anterior, pero si igualarlo en intensidad con un «Headup» bastante bruto.
A la noche siguiente lo bordaron en Barcelona con 2 horas y algo de concierto y tocando «Adrenaline» entero… Pero en Madrid vimos una auto parodia de si mismos, aunque con un buen setlist de fondo.
La gente ya había llegado, los aplausos cuando salía la batería de Danny Carey aparecieron, la gente hablaba con sus compañeros sobre las cuatro pantallas que fueron colocadas… En fin, mucha expectación había por lo que se nos venia encima. Y es que Tool, tras 5 años de silencio habían vuelto. Y lo habían hecho con la máxima expectación, parece que ya Tool es un grupo «mainstream» hasta en España.
Con mucha rapidez se preparo todo encima del escenario, se apagaron las luces entre aplausos. Salieron Adam, Danny y Justin y comenzaron una breve introducción, mientras aparecía Maynard. En esta gira cuatro pantallas se sitúan en el fondo, detrás de cada miembro. En los laterales y mucho mas alante de los otros dos se situaban Adam y Justin, detrás en una plataforma estaba Danny (y su mastodontica batería) y Maynard que apareció con unos vaqueros y un gorro de cowboy al más puro estilo tejano-George Bush.
Difícil poder empezar mejor un concierto que con «Stinkfist», donde ya pudimos comprobar que aunque el sonido no era demasiado bueno era mucho mejor que el de Deftones. El público saltó y vibro cantando cada estrofa, igual que con la segunda de la noche «46 & 2». Tras meterse al publico en el bolsillo con ese par de guiños al «Aenima», sonó «Jambi», segundo corte de su ultimo trabajo «10,000 Days». Brutal sonó en directo. Sonido muy bueno (el mejor sonido que he tenido en un concierto en La Cubierta de lejos) y un Adam Jones especialmente increíble durante su solo.
Buen comienzo, pero muy previsible comparados con sus set list en la gira Americana. Luego vino «Schism» mucho mas celebrada de lo esperada, casi diría más que «Stinkfist» por ejemplo. Maynard desapareció del escenario y el resto de la banda comenzó una breve improvisación que termino sonando a «Lost Keys». Para cuando acabaron, apareció Maynard con una especia de megáfono colgado con el que canto la primera parte de «Rosetta Stoned». La segunda parte de la canción, fue realmente increíble. Danny se llevaba al público de calle una vez más y el público aplaudía cada acrobacia sonora del batería como si de un superhombre se tratara.
Posteriormente sonaron 4 temas más, pero no 4 temas cualquiera de la banda. 4 temas: uno por cada disco («Opiate» aparte), a cada cual mas representativo del álbum al que pertenecía. Primero una de las canciones míticas de siempre de la banda, «Sober». Me sorprendió que fue muy cantada por el respetable. Luego uno de los momentos del concierto, «Lateralus». Enorme reinterpretación de la canción, magnifica con todos los efectos de luz y unas pantallas de luz de 10. Después sonó el single de «10,000 Days», «Vicarious», que fue muy celebrada también, y es que parece que esta canción debido a su filtración por Internet ya había sido disfrutada por muchísima gente. Para cerrar un tema que deberia ser mas mítico de lo que es, «Ænema». En los que tuvimos uno de los momentos mas calidos entre grupo y público de todo el concierto.
Broche de oro para una actuación que dejo flipado a todo el mundo. A algunos quizás, les aburrieron un poco, pero lo vieron con «ojos de plato». Y es que otra cosa no, pero Tool no deja indiferente a nadie. Sobre todo se vio mucha camiseta de Tool al salir (pero mucha…) y mucha lavación al concierto, que todo sea dicho… no fue tan inmenso como el de La Riviera, pero aun así fue impecable.
Bueno, había poco tiempo para asimilar todo: al día siguiente Alice In Chains y al siguiente Tool de nuevo, esta vez en Barcelona…