Una de las bandas más brillantes que ha dado el panorama nacional en los últimos años, teloneando a su «mentor» e ídolo. Eso es lo que nos esperaba en la madrileña sala Moby Dick aquella noche de invierno. Por un lado, los catalanes Madee se suponía que nos repasarían su discografía con algún que otro adelanto a su próximo disco. En el otro lado, Jeremy Enigk, el que fuera líder de Sunny Day Real Estate, probablemente la banda de cabecera de los teloneros.
Como decíamos, esperábamos oír cosas nuevas de Madee. Pero por contra nos topamos con lo mismo de siempre… ¿Es eso malo? Pues hombre, es desde luego un mal menor, porque menudo concierto. Una vez más, pletóricos… Y eso que se dejaron en el tintero por falta de tiempo temas como «Fallen Heroes», «Orion’s Belt» o el ya clásico «S’ Ba». La banda parece que está bastante ensayada, en vez de lo que uno podía esperar ante un par de años sin estar por ahí girando. Desde el «Wonderful Lie» inicial hasta el «Economy» final, simplemente geniales. «Clumsy» cada día más coreada y por medio, la perfecta unión entre la emotividad (aprendieron de un maestro como el propio Enigk) junto a la rabia desgarradora de Ramón con el micro quedó demostrada con clásicos de la banda como «Impulsor» o «Secret Chamber» u otros como «Mintaka» o «Alnitak». Ahora que hemos recordado como sonaban en directo, sólo podemos decir que les necesitamos urgentemente de vuelta.
Tras el pertinente parón, nos topamos con que parece ser que lo que leíamos en los carteles del concierto con un claro «Jeremy Enigk + Madee» iba a ser algo con mucho más sentido. Y es que Ramón (cantante y guitarrista), Lluis (batería), Pep (bajo) y Marc (teclista) iban a acompañar al entrañable Jeremy en el show, en una especie de formación exclusiva para esta «gira española». A pesar de todo, el comienzo fúe con una muy emotiva «Asleep Under Last Week’s News» interpretada solo por Jeremy, que ya tenía a todo el público de su lado.
Ya con el resto de la banda en juego, tuvimos temas de su primer disco como «Abegail Anne», «Frog Queen» y «Lizard» todo del tirón, en la que vimos una brillante interpretación de los 4 miembros de Madee que había encima de las tablas, con un más que considerable entusiasmo por parte de Lluis en «Frog Queen» a la hora de aporrear la batería. Bueno, eso fue una constante en toda la actuación como en «Set It On Fire» o en canciones más pausadas como «Cannons».
Los temas de su nuevo disco, pasaron por el filtro de esta banda tan «momentánea» con muy buena salud y un altísimo grado de espontaneidad y entusiasmo (también por parte de Jeremy). Sirvan de ejemplos los preciosos teclados en «River To Sea» o en la emotiva «World Waits». Aunque sin duda, si decimos que mejoran las canciones de Enigk en directo es sobre todo gracias a que este señor sigue teniendo una de las voces más conmovedoras del momento como demostró el solito en los momentos de «Lewis Hollow» y «On I Can’t Kick». Probablemente la conjunción entre toda esa fuerza a la batería, precisión de bajo y teclados y una alegría espontánea de guitarras y la memorable voz de Jeremy tuvo en el último tema del set normal su punto álgido. Y es que «Shade And The Black Hat» fue un momento verdaderamente mágico con una ovación que duro mucho, muchísimo.
Con los bises llegó el momento esperado de oír algo de Sunny Day Real Estate, concretamente fue una coreada «How It Feels To Be Something On» de Jeremy sólo al piano (como en el resto de temas que nos quedaban) que dejó a todos con un muy buen sabor de boca. Memorable fue el momento en que un incontenible fan (de sexo masculino) subió tranquilamente al escenario para propinarle un beso en toda la calva al bueno de Enigk. Después vino «Explain», dónde nos volvió a demostrar que la voz sigue ahí en su sitio. Como regalo, finalizó con «Mother» de John Lennon, dejando a sus devotos con ganas de mucho más. Bueno, sobre todo al de los besos, que no le dejó irse al camerino hasta no haberle contado quien sabe que… Este no se si será un matrimonio muy bien avenido, pero el de Jeremy Enigk + Madee es de los mejores que uno puede tener delante.
