/Crónicas///

Cure, The – Madrid (06/03/2008)

Robert Smith, Simon Gallup, Jason Cooper, Porl Thompson
9.2
Palacio de los Deportes, Lleno
Precio: 40 a 50 €
Géneros: ,

SETLIST:
plainsong
prayers for rain
a strange day
alt.end
the blood
the end of the world
lovesong
to wish impossible things
pictures of you
lullaby
from the edge of the deep green sea
hot hot hot!!!
please project
push
friday i’m in love
inbetween days
just like heaven
primary
a boy i never knew
never enough
wrong number
one hundred years
disintegration

BIS 1:
at night
m
play for today
a forest

BIS 2:
three imaginary boys
fire in cairo
boys don’t cry
jumping someone else’s train
grinding halt
10:15 saturday night
killing an arab

BIS 3:
why can’t i be you?

Pocos se pueden permitir el lujo de marcarse shows de tres horas durante toda una carrera. En el caso de los británicos The Cure parece que más que un lujo es una obligación para los fans.

De igual modo, pocas veces hay labores de teloneros tan duras como las de abrir para Robert Smith y sus chicos. Eso les ocurrió a los también británicos 65daysofstatic, que se enfrentaron a un Palacio de los Deportes enormemente vacío, a pesar de ser una de las formaciones de post-rock mas esperadas por nuestro país. Si a todo eso le sumamos un sonido carente de los matices que una banda detallista como ellos precisan, el concierto quedó mas como un leve alivio para los seguidores de la banda que como un intento de ganarse un público que no les pertenecía. Un quiero y no puedo, vamos…

La duración de los conciertos de The Cure también afectó al escaso público del que gozaron los teloneros, pero además afectó a que Robert Smith y el resto de la banda salieran tan puntuales que las colas en las puertas se tornaron en imposibles. Miles de personas fuera y el concierto ya estaba en medio de la tensión introductora de «Plainsong» y la posterior «Prayers Of Rain». Evidentemente, el público que ya poblaba el suelo se desató en cuanto Robert salió a escena secundado por Porl Thompson y Simon Gallup, pero no fue hasta un poco mas adelante cuando vimos lo que son capaces de hacer The Cure ahora mismo. Coincidía con una muy apropiada guitarra española en «The Blood», que todo el mundo ya estaba dentro y con que sonaba posteriormente una fantástica versión de la pieza clave de su último disco, «The End Of World». Además, la vertiente pop que prosiguió de clásicas como «Lovesong», «Lullaby» y sobre todo «Pictures Of You» entremezclada con la oscuridad de «To Wish Impossible Things» fue de lo más mágico.

Esa guerra entre la faceta pop continuaba alternando piezas de «Kiss Me, Kiss Me, Kiss Me» como «Hot Hot Hot!!!» u otras de «Wish» como «Friday I’m In Love». De hecho, esta última pieza nos trajo lo mejor del concierto demostrado no sólo en un repertorio que contó de carrerilla con piezas tan básicas como «Inbetween Days» o «Just Like Heaven», sino con una comodidad impactante por parte de Smith y Thompson a las guitarras. De hecho, se permitieron redondear con su faceta mas post-punk de principios de los 80 con un guiñó a los fans como tuvieron con «Primary». Una pena que todos esos momentos se vieron claramente frenados por dos piezas de su etapa más reciente con la cara B «Never Enough» y con una algo más acertada «Wrong Number», ya que posteriormente pudimos disfrutar con un fin de fiesta soberbio y oscuro con la batería de Jason Cooper en «100 Years» y con la voz de Robert Smith en «Disintegration».

El concierto, a pesar de ya estar mucho mas lejos de la hora y media, había pasado bastante rápido. Probablemente debido a que el show de The Cure en 2008 es sobre todo un grandes éxitos sin concesiones a discos nuevos . Ritmo trepidante de canciones sin pausas y eso, repleto de canciones que hasta el mayor pasota musical debe conocer. El primer bis apenas contó con otra de esas piezas – en concreto «A Forest» para cerrar – pero si contó con un sorprendente repaso a su ochentero «Seventeen Seconds» incluyendo impecables versiones de «M» o «Play For Today», que aun así pudimos achacarle una ausencia notable de teclados.

Si el primer bis fue de «Seventeen Seconds», el segundo fue aún mas sorprendente y certero. De esa pelambrera, Smith se sacó un guiño muy bueno a «Three Imaginary Boys» incluyendo dicho tema y una mucho mas madura «Fire In Cairo» (para bien o para mal) que la que encontrábamos en 1979. «Boys Don’t Cry» puso la guinda al repaso con uno de esos momentos en que mires dónde mires todo el mundo canta, baila y es feliz independientemente que vayan de negro y con los ojos pintados. El ritmo del bis continuó trepidante, enlazando «Jumping Someone Else’s Train» y «Grinding Halt», para terminar cediendo de nuevo al postpunk de «Three Imaginary Boys» de la mano de «10:15 Saturday Night» y «Killing An Arab» con la canción que suele terminar la cosa.

Así que como no estaba nadie preparado para irse de allí con un bis de menos que en el resto de ciudades, convencieron a la banda para que saliera una vez más. Solamente tocaron una «Why Can’t I Be You?» que sufrió la gran baja de teclados que habíamos hablado (en esta ocasión no hubo «The Lovecats» ni «Close To Me» de la que quejarse). Aún así, un final mucho mas adrenalínico que el habitual empacho a post punk de «Killing An Arab» para cerrar.

En definitiva es un placer ver que aún quedan bandas en el Olimpo de los Dioses tan honestas y placenteras a la hora de tocar como la del señor Robert Smith. Tres horas de sonido perfecto (al menos, en mi zona) que podrían haber sido media hora más sin hacerse la cosa ni medianamente pesada, pero que podrían haber brillado del todo si se decidieran a tirar de teclados.

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6 de marzo de 2008