Stolen Babies son realmente una banda poco al uso, que practican una especie de punk-rock-gótico desmadrado (por llamarlo de algún modo), lo más increíble es que una combinación de este tipo no chirríe por ningún lado. Su disco debut There Be Squabbles Ahead se ha colado por méritos propios entre lo mejor que ha dado este 2006
Gamberros, con garra y sin desprenderse de un aire tétrico y cañero que abunda en todo el disco, arranca la primera mitad de éste trabajo dónde Stolen Babies dan rienda suelta a los ritmos acelerados y animados y el guitarreo más frenético, sin olvidar los estribillos y repeticiones melódicas que permiten tararear sin descanso las canciones desde la primera escucha, destacaría Awful Fall y Tablescrapp, que con su peligrosa adicción me parece el mejor tema del disco.
Ayuda bastante la voz femenina de Dominique Persi a adentrarse en la atmósfera gótica-tenebrosa del disco, apoyada con elementos como un eventual acordeón o los más habituales sintetizadores.
En medio de tanto desmadre sin embargo, despunta cual claro en medio del bosque un temazo llamado Lifeless, que envía a la mierda cualquier idea fija que uno se hubiese podido formar del grupo en forma de balada más popera, con un estribillo simple pero eficaz como ninguno en el que Dominique demuestra cómo puede dar de si su voz en un contexto más sosegado. Sin duda alguna de lo mejor del disco, a prueba de oyentes odia-baladas.
Para terminar pone el broche a este discazo las dos últimas canciones tienen un aire más instrumental, si bien Gathering Fingers es más tétrica y The Button Has Been Pushed parece más una broma del estilo canción de feria para terminar de escuchar el disco con algo de alegría.
En resumen, un muy buen disco para los amantes de las mezclas de estilos o sencillamente para quién busque escuchar algo distinto y de calidad. Siendo éste su primer disco, asusta pensar de lo que pueden llegar a ser capaces esta gente con el paso del tiempo, habrá que estar atentos.