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Kiss The Anus of a Black Cat – Weltuntergangsstimmung

Kiss The Anus of a Black Cat - Weltuntergangsstimmung portada
Zeal Records, 2012
Banda: Stef Heeren

Géneros: , , , ,

7.4

La evolución musical es algo que se da a todos los niveles. Puede que cuando ocurre a una banda de pop que de repente escriba canciones más complacientes con el gusto mayoritario, este fenómeno esté en boca de todos. Pero no podemos olvidar casos mucho más underground como el de Kiss The Anus of a Black Cat. No parece que con un bautizo semejante los belgas tuvieran aspiraciones comerciales muy altas y sin embargo poco a poco han llevado su sonido del dark-folk a otros territorios igualmente oscuros pero claramente más melódicos.

«Weltuntergangsstimmung» rezuma esa oscuridad marcial, ritmos secuenciados y baterías programadas que nos hacen pensar en el industrial más primigenio, pero se adentra más de lleno en la rama siniestra de la música popular durante los 80, el nihilismo post-punk mezclado con los sintetizadores de la new-wave que fue lo que desembocó en la llamada dark wave. En definitiva, la banda ha aniquilado casi cualquier resonancia folk en favor de los sintetizadores, algo que los fans les pueden echar en cara sin duda.

La cuestión es que si Stef Irritant, artífice del proyecto, ha querido hacer un disco de género, lo ha hecho notablemente bien. Su sonido sigue siendo ritual, sólo que tiene bien poco de orgánico ya. Se dedica a provocarnos el escalofrío con una música dramática de avance lento y aires goth («My Word As a Gospel», «Weltuntergangsstimmung»), construye hits de instrumentación deshumanizada («Define P», «Shake Off Your Dreams»), retiene vestigios de ese folk apocalíptico e hipnótico («Ruins») y abraza el pop oscuro («The Shadows Are You») e incluso con coros («Let Things Drift»).

Con esos ingredientes en principio muy enfocados la verdad es que crea un disco inquietante y en el que no hay lugar para el tedio. Sólo en «Triple Fall» se le va de las manos la melodía sintética bordeando el peligroso terreno de los ‘new romantics’. Algo fácilmente perdonable dentro de un cóctel en el que resuenan tantas referencias asociadas a la música de aquella década que parece un tributo expreso a estos estilos.

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1 de enero de 2012