La avalancha del revival post-punk como todas las escenas que se ponen de moda acaba cansando. O eso sucede cuando los grupos se toman demasiado en serio a si mismos, lo cual está muy lejos de ser el caso de los ingleses Dartz! Este trío de veinteañeros coge lo divertido de todo este revival, se desprende de la oscuridad y entrega un disco breve y directo, destinado al baile desenfrenado y de atmósferas más agradables, acercándose a propuestas como la de los también ingleses y también exclamativos ¡Forward Russia!.
Así, la cosa comienza con buen ritmo y palmadas en «Network!Network!Network!» y continúa con «A Symple Hipotetical» que hará las delicias de quienes gustaran del rock melódico bailable y con gancho del primer trabajo Bloc Party, aunque con un toque algo más gamberro. Se toman un pequeño respiro para crear en «!Once, Twice, Again!» un tema con una vena claramente más power-pop, sin perder el pulso bailable o «Cold Holidays» que alterna esta faceta de melodías indies con la hiperactividad rítmica del post-punk.
Interesantes ritmos orientalistas abren rampantes «Prego Triangolos» que con sus desaliñadas voces y consignas ponen el momento más punk hasta el momento. Se retoma la velocidad en «Laser Eyes» una nueva muestra de lo bien que el trío saca canciones de indie-rock bailable sin mucha pretensión pero efectivas.
La nota de prensa haba de Q And Not U, Devo o This Ain´t Vegas. Añadamosle unas pinceladas de emo de amplio espectro, desde Death Cab For Cutie a At The Drive-In y tenemos este disco. Un disco destinado a propiciar no pocos buenos momentos en directo, uno puede imaginarse al público bailando y dando palmas al ritmo contagioso de los doce temas de «This Is My Ship».