Desde Cantabria, Cuming Soon es un trío que nos trae un rock de clara herencia setentera. Los riffs y líneas vocales inspirados en el blues mueven su música al igual que en su día pasara con Led Zeppelin y más tarde con Black Crowes. Son por tanto portadores de un sonido clásico, con apenas influencia de la vena más metálica que se ha acomodado en la etiqueta de stoner. Por su parte, la portada del disco sugiere tal vez un tono más progresivo del que encontraremos, ya que los aires sureños acompañarán todo el disco.
Y es que ya los acordes de «Prelude» nos lo dejan claro, pero realmente la cosa empieza a sorprender con «Hard Lady Vision». Y es que nunca he sido partidario de juzgar a un grupo por la procedencia, pero en un estilo con una denominación de origen tan marcada encontrar una voz así te hace mirar los tags de tu mp3 para ver si efectivamente estás escuchando al grupo de Santander, que tampoco es la ciudad más rockera que conozcamos.
Si «Magic Tale» muestra una faceta más cadenciosa y llevadera, «Chalk» combina riffs oscurísimos, tendiendo a los tintes metálicos y un estribillo amenazador que noquea. Pero es «Magari» la clave para canalizar las buenas impresiones. La banda muestra ahí su registro más intimista y bluesero con coros femeninos consiguiendo un clima muy auténtico que nos recuerda tanto a la época hippie como a los mucho más tardíos Blind Melon.
Regresan de la emoción a la diversión con «Lustfeeder», festiva y con un toque algo más AC/DC-ro, desarrollos instrumentales bluesies al servicio del rock directo. «Steppenwolf» no suena a «Born to be wild» sino más cercana a los Crowes con su acusticidad polvorienta y sureña, al menos hasta que arranca el torbellino rockero a plena potencia.
Volverán a la contención blues-rockera con «My Baby’s Gone» movidos por la fuerza de los riffs salpicados con algunas baterías más exóticas. Para el final parece que buscan cosas nuevas porque si en «Vietnamese Prostitute» se muestran más permeables al sleazy con la rasgada garganta buscando el estribillo, en «Exiled» es música y ritmo los que se ponen juguetones de la mano del funk-rock y con un toque claramente festivo.
Cuming Soon desde luego demuestran una gran cantidad de virtudes. Solvencia instrumental más que sobrada, una voz muy auténtica y un evidente conocimiento del libro de estilo del hard-rock 70s. Lo malo de esto último es que les convierte, hoy por hoy, una banda de revival en toda regla, echando en falta riesgo. Ahora, que teniendo a The Answer o Airbourne por ahí triunfando, ¿quién dice que esto sea algo en su contra? Desde luego con un sólo disco ya suenan a grandes, si en directo saben mantener el tono, deberían dar que hablar en el mundillo del rock.