...And You Will Know Us By The Trail of Dead fueron desde sus inicios una formación curiosa por sonido y circunstancias. Tal vez fuera la euforia post-At The Drive-In la que hiciera a medios especializados empeñarse en encumbrar una joven banda que se negaba a ser mediocre. Conforme les ha venido la madurez parece que ese inconformismo se ha vuelto en contra de quienes alabaron sin reparo «Madonna» y su celebrado «Source Tags & Codes». Tras los gestos de desaprobación hacia «Worlds Apart» que estuvieron a punto de acabar con la banda, afortunadamente continúan sin recular en «So Divided».
Si, los de Austin han crecido, han aprendido a olvidarse de las críticas y han apostado por un pop psicodélico revestido de épica abandonando todo poso «core» o de indie ruidoso (fueron aclamados como unos nuevos Sonic Youth). Un disco de celebración aunque repleto de sarcasmo que arranca enérgicamente con «Stand In Silence», himno rock delicioso que cruza aires californianos y británicos con solemne marcha medieval en el ecuador. Este explosivo inicio continúa en los ecos y destellos de «Wasted State of Mind»; una voz hechizante traslada al oyente a reinos de fantasía, arropado por las galopantes percusiones de Pat Mastellotto (King Crimson).
Un cambio de tercio hacia la convencionalidad propone «Naked Sun», boogie-indie-rock con secciones de viento que culmina en una catarsis lisérgica que tan bien entronca con la relectura de Guided By Voices en la hermosa «Gold Heart Mountain Top Queen Directory», guiada por un piano. Siguiendo con el instrumento -cada vez más importante en sus composiciones- «So Divided» asoma como un arrebato que recuerda a Bowie. Un tema que evoluciona y que sí se acerca puntualmente a unos Sonic Youth improbablemente dados al drama épico.
Más pop de corte británico bien arreglado encontramos en «Life» y la correcta fagocitación de estilos continúa con el saltarín pop psicodélico de «Eight Day Hell» emulando a los Beach Boys. Acto seguido llega la balada «Witches Web», con la aparición estelar de otra triunfadora del año como es Amanda Palmer (Dresden Dolls) que también aporta su sensibilidad con las teclas en las tres canciones de este bloque.
Finalmente, tras lo que parece una ‘outro’, la demostración culmina con «Sunken Dreams», una tormenta inédita en el disco, que rememora viejos tiempos más tortuosos.
Es de aplauso que el cuarteto haya preferido encarar las cosas aplacando la rabia y transformándola en ironía engarzada en canciones hermosas y de riqueza instrumental (violines, saxos, acordeón…) aplastante. Barrocos a la par que ligeros, Trail of Dead demuestran que pasan de etiquetas y firman otro impecable disco. Tras esa portada como de entrega de Final Fantasy hay un talento al que no se debería poner trabas.