Llegó el cambio de año y con ello no sólo tortuosos anuncios con los ojos desórbitados de la Caballé o la mandíbula desencajada de Raphael sino también las temidísimas listas de lo mejor de la temporada. No me voy a quejar de lo de siempre (el que quiera seguir haciendo listas en noviembre para hacerle el trabajo a Amazon, allá él), lo que quiero analizar hoy es el fenómeno «pa hipster yo» de las listas de los grandes medios que nos está dando muchas risas y más que promete de cara al futuro. La incapacidad de algunos medios de mantenerse al día de lo que el imperio del moderneo musical dicta reteniendo al tiempo una cierta dignidad, resulta entrañable.
Propuesta de portada catálogo otoño-invierno de Pull & Bear
Este año dichos tops cuentan con un claro ganador, quizá no absoluto pero desde luego que moral. No hablo de Kanye West, ni de James Blake, ni de Vampire Weekend, que ocupan puestos altos más o menos previsibles. Estoy hablando de Pitchfork Deafheaven y ese «Sunbather» que se ha colado en las listas de todo tipo de medios, aún en las de los que se han enterado con meses de retraso de la existencia de disco -y grupo, claro- o en las que el rastro de metal o algo que se le parezca es inexistente.
A algunos les ha entrado el pudor y, obligados a meter esa obra maestra como fuese para no quedar de ignorantes de la vida y del blackmetal gafapasta, han hecho su propia lista de metal colocándoles número 1, para disimular. El caso más divertido es el de la Rolling Stone, que ha hecho exactamente esto último. Cuando vas a leer la reseña de un único párrafo que han dedicado a tan importante lanzamiento para su publicación, descubres que le han puesto 3 estrellas sobre 5. El mejor disco de metal para la Rolling Stone en 2013 merece un 6, qué medio tan exigente.
El efecto «eyelid», realza tus portadas de black-metal
Para colmo Pitchfork, auténticos cerebros de todo este hype, ni cortos ni perezosos han elegido la de «Sunbather» como mejor portada del año, lo cual termina de atar los cabos de por qué a este disco se le ha hecho tanto caso fuera del circuito del metal o incluso del rock alternativo si me apuran. Ya sabíamos que los triángulos o los búhos se habían convertido en todo un cliché del metal moderno, pero ahora tiemblo con sudores fríos ante lo que el fenómeno Deafheaven nos puede traer. Donde siempre reinó el blanco y negro, los filtros de fotografía desgastada, la truculencia y la total ausencia de gusto, ahora la avalancha de portadas en degradados de colores vivos con tipografías de diseño se promete agotadora.
La última en la frente ha llegado con las listas de Metacritic, web que se dedica a aglutinar puntuaciones de prensa de, en este caso, discos. «Sunbather» no sólo ha alcanzado el número uno al ser el disco mejor valorado por la crítica en 2013, lo cual ya se antoja un poco extraño en unas listas en las que cabe absolutamente todos los géneros musicales. La cosa es que además se posiciona como el séptimo disco mejor valorado por la crítica en general (es decir, el séptimo disco favorito de la crítica de toda la música contemporanea, segun sus mediciones). Ni que decir tiene, que es la primera vez que un álbum de metal alcanza dichos honores tan improbables.
Mientras tanto, los duendes navideños de Pitchfork ríen traviesos empaquetando metafóricamente «Sunbathers» para todos en estas navidades jubilosas. Un montón de peña en el primer mundo escuchando a un tío gritar sobre colchones shoegaze y convenciéndose de que esto mola cuando cualquier cosa desde el black metal a Envy se la ha sudado siempre. Se tienen que echar unas risas buenas a costa del personal estos cabrones. Yo haría igual.
Por mi parte sólo decir que me agrada «Sunbather» y que también me gustaba «Roads to Judah», pero qué cojones, que me gustan más California X, que no hacen black ni nada parecido, pero al menos en su portada sale una chupa vaquera, eso si que es true. Nada más que desear que, ya que hablamos de trapos, podamos ver a Deafheaven en el Primavera Sound antes de que H&M lance una colección de camisetas con la portada de marras.
Para el que no se entere de la fiesta, aquí debajo va el disco de la discordia entero en Youtube y aquí nuestro formulario de votaciones para que no dejéis de meterlo en vuestras listas.