Si asististe sólo por ver a Monochrome, no sigas leyendo esta crónica. Yo personalmente no me quedé porque tenía otras cosas que hacer, y la verdad, que llevo una temporada excesivamente saturado de conciertos, pero fui tan friki como para pagar los 10 euros de la entrada para ver únicamente a Segunda Apnea.
Gran disco el de los barceloneses. En una escena últimamente con demasiadas bandas cortadas por el mismo patrón, Segunda Apnea, aunque su nombre signifique lo contrario, suponen una verdadera bocanada de aire fresco. Haciendo dos cosas totalmente obvias esta banda consigue distinguirse del resto: letras en castellano y voces claras. Todo ellos aderezado con unos temas con una progresividad contenida pero muy agradables incluso a primera escucha y que tienen además la virtud de no cansar.
Quedaba comprobar si eran capaces de llevar al directo un disco que no se me antojaba fácil. A lo largo de los cuarenta y cinco minutos, tiempo que emplearon en tocar íntegramente el disco, francamente lo lograron. Desde el inicio con la instrumental «La Atlántida», pero sobre ya con voces, con «Miran al cielo», me convencieron plenamente. Además y quizás sea una impresión mía, Marc en disco me recuerda en la manera de cantar a los últimos Standstill, pero queda un poco en segundo plano. Ahí está más contenido, pero en directo despliega mucha más voz y canta verdaderamente bien. Todo ello además aderezado con una muy buena base rítmica y disposición escénica. Además asistimos a la preparación de efectos y al empleo, eso sí, escaso, de instrumentos de viento. Como única crítica, el último tema sonó algo más embarullado que el resto, pero fue un directo de nivel. Además me parecieron una gente cercana, con el comentario de que había merchandising de discos, camisetas, pegatinas gratis, pantumaca y butifarras.
Muy buen concierto, y la única pena para mi, habérmelos perdido en su anterior visita a Madrid por desconocimiento, en dónde por referencias me han comentado que no fue demasiada gente. Aquí la sala Sirocco, para ser domingo, presento una estupenda entrada. Espero poder volver a verles pronto por la capital.