/Crónicas///

Ghouls ‘N’ Ghosts – Barcelona (21/10/2006)

Rammón Rodríguez, Santi GArcía, Victor García, Carles Mayor
8.5
Recinto, Medio lleno
Precio: 8 € /15 € con CD

Ghouls ‘n’ Ghosts, la banda nacional que más revuelo ha causado éste 2006, escogió la sala La [2] (anexionada a la Sala Apolo) para presentar en condiciones su debut disco homónimo, puesto que la sala de conferencias de la Fnac Triangle de Barcelona dónde se llevó a cabo el anterior Show no disponía de las características más adecuadas para un evento de este tipo.

Una curiosa anécdota: minutos antes de comenzar el concierto, Ramón Rodríguez (vocalista y guitarrista del grupo) intentó entrar en la sala y el portero le barró el paso, con lo que tuvo que excusarse con un: «oye, que yo soy de la banda».

Apenas cuatro gatos había en la sala cuando salieron en escena los barceloneses Egon Soda, practicando un pop rock emotivo y muy bien ejecutado aunque quizás algo falto de identidad propia, instrumentalmente impecables aunque en opinión de un servidor las letras del grupo dejaban bastante que desear. Con todo supusieron un buen aperitivo al plato fuerte que vendría a continuación.

Coincidiendo con un aforo algo más lleno salieron a la palestra Ghouls ‘n’ Ghosts, cuyos integrantes ya estaban charlando anteriormente con los miembros del público, una de las muchas muestras de la falta de barreras entre espectadores y banda, que resultaron de agradecer en lo que terminó siendo un concierto la mar de intimista y compenetrado, algo que otros grupos en conciertos más multitudinarios son incapaces de dar.

La única relativa decepción fue que el setlist era idéntico al de su álbum, aunque también podía esto tomarse como si uno se pusiera tranquilamente el disco pero en vez de oírlo por la minicadena, la banda estuviese ahí tocándolo.

Ahora bien, si en algo brillan estos chicos, es en su ejecución en directo, ya que el sonido era clavado al del disco, con el incentivo del directo; todas las canciones fueron sublimemente ejecutadas y la carga emocional de sus melodías hizo que los pelos de un servidor se pusieran de punta en numerosas ocasiones.

Especialmente me caló Delicate, que por alguna extraña razón la redescubrí al oírla en directo, o la más pegadiza imposible Push Me Away, aunque por nombrar ya podría decir todas sus canciones del tirón ya que todas brillan con luz propia, aunque hago especial mención a Le Cirque, que también ganó un feeling especial en directo.

Resumiendo, un concierto estupendo, con una ejecución absolutamente impecable y con un aire intimista que emociona como pocos, gracias a la genial predisposición del grupo. Si hubiese que achacar algún punto negativo quizás sería la previsibilidad del hecho que usaran el mismo orden de canciones que en el disco, aunque seguro que lo van a remediar cuando saquen su próximo trabajo.

Contenido relacionado

21 de octubre de 2006
Por