Cualquiera que viera el concierto de Bruce Springsteen and the E Street Band en el estadio José Zorrilla de Valladolid va a llamarme loco (sobre todo los que no estuvieron en Bilbao o Santiago), pero dicho concierto nos mostró un Springsteen que salió a ganar pero dejando muchos jugadores titulares en el banquillo. Ni su garra fue la de otros conciertos ni sus ganas desaforadas. ¿La razón? Que el final de gira en Compostela era el día siguiente, algo poco habitual en sus calendarios.
Pero no nos engañemos, que aquí no hablamos de un cualquiera. Bruce estuvo pletórico a la hora de mostrarse con la gente, también a la hora de tocar, pero supo dosificarse y cortar antes de llegar a las ya habituales 3 horas de concierto. Quizás el repertorio fue una de las virtudes, sobre todo gracias a sorpresas venidas desde el público.
De nuevo el concierto comenzó con «Badlands», lo que le quita una gran dosis de sorpresa al evento. Al menos está la cosa de la sorpresa del momento acordeón, cuya responsabilidad recayó en Roy Bittan y en un pasodoble typical spanish. Una imponente «No Surrender», una siempre agradable «Night» que suele caer mucho en España y la visita a las masas con una habitual de la gira como «Hungry Heart». La nueva «Outlaw Pete» se mostró soberbia en todo momento, mucho más que la propia «Working On A Dream».
Las buenísimas virtudes empezaban con una muy vibrante «Spirit In The Night», para entrar en una fantástica racha que terminó siendo lo mejor del concierto: el vestigio de la gira de «Born In The USA» que es el dúo rockero formado por «Seeds» y «Johnny 99», la vibrante versión del clásico reggae de Jimmy Cliff que es «Trapped» para rematar con el momento recogida de carteles con el clásico «Raise Your Hand» de fondo.
En las peticiones tuvimos lo mejor y lo peor, aun habiendo acabado el triplete con una poco interesante «Surprise, Surprise» (detalle simpático al menos tocarla, habiendo sido pedida por una niña en el día de su cumpleaños). Para eso primero salió a la luz un cartel que rezaba «You Ain’t Got Great Balls Of Fire»… Entre las risas del grupo y el propio Bruce llegó el premio: «Great Balls Of Fire» de Jerry Lee Lewis ampliamente mejor en sentimiento que en ejecución. Después, «Something In The Night» fue el contrapunto interior perfecto. Buenos momentos.
A Bruce luego le dió por pasearse entre la gente aprovechando que el Pisuerga pasa por Valladolid: «My Love Will Not Let You Down» como semi-no habitual y el típico numero de «The Promised Land» que tanto gusta (armónica regalada). «Girls In Their Summer Clothes» fue una sorpresa que a priori puede sonar poco apetecible (sobre todo habiéndola visto en la gira anterior siempre), pero la verdad que es uno de los mejores temas que el Boss ha compuesta últimamente y eso en vivo se nota.
Probablemente, si tuviera que quedarme con algo del concierto me llevaría «American Skin (41 Shots)»: ejecución perfecta, público no demasiado vibrante pero muy respetuoso… Perfecto. El resto del set, pues el final de siempre: «Lonesome Day» y «The Rising» exageradamente coreadas y «Born To Run» exhaustos.
Para los bises, entre fijos como la parranda de «American Land» y el momento baile ochentero de «Dancin’ In The Dark», aparecieron mas momentos rockeros como el «Seven Nights To Rock» de Moon Mullican o el «Twist & Shout» final. Algo fuera de sitio quedó «Bobby Jean» entre tanto movimiento, pero siempre viene bien.
