/Crónicas///

Muse – Badalona (28/10/2006)

Matthew Bellamy, Chris Wolstenholme, Dominic Howard
10.0
Pavelló Olímpic, Lleno
Precio: 33 €
Géneros:

Take A Bow
Hysteria
Butterflies & Hurricanes
Map Of The Problematique
New Born
City Of Delusion
Plug In Baby
Forced In
Bliss
Hoodoo
Sunburn
Invincible
Supermassive Black Hole
Starlight
Time Is Running Out
Stockholm Syndrome

BISES:
Apocalypse Please
Muscle Museum
Knights Of Cydonia

Muse arrasó. No puede describirse de otra forma, la vuelta a los escenarios de los británicos en este 2006 presentando su aclamado «Black Holes and Revelations», que ha dejado a todos sin aliento, cumpliendo de sobra la grandilocuencia que se respiraba en éste último trabajo, pero en vivo.

Para empezar la velada, los simpáticos miembros de la organizadora (nótese el tono sarcástico) decidieron hacer pasar por entradas distintas a la gente de grada y a la de pista, en contra de cómo siempre se había llevado a cabo el acceso al Palau d’Esports de Badalona. Provocando que los que llevábamos, pel cab baix, una hora esperándonos tuviésemos que reempezar la cola cuando los miembros del staff lo notificaron a grito pelado.

Superado el cabreo inicial, (siguiendole una pérdida y posterior reencuentro con mi acompañante incluida) saltaron en escena los barceloneses Poet In Process. Empezaron su actuación con temas de tinte indie rock pausado, para sorprender luego con algún tema más propio del hard rockeo más desmadrado; una estupenda banda la mar de prometedora con una atractiva y carismática cantante, que hicieron valer de sobras su derecho de telonear a unos monstruos como Muse.

Puntuales apagaron las luces y se empezaron a oir las primeras notas de «Take a Bow», la orgásmica intro del último disco que hizo lo mismo en este conciertazo, cómo no podía ser de otro modo, locura general con este progresivo tema. Tengo que comentar antes que nada el espectacular mimo visual que pusieron Muse en el concierto, con luces hasta el infinito y mas allá, pantallas laterales y una de fondo compuesta por luces minúsculas en las que se ivan proyectando imágenes digitales que concordaban con las canciones, o bien escenas del concierto con filtros de imagen añadidos. Además como guinda del pastel el batería estaba escondido en una especie de capsula (con aún mas luces) cuyo techo iba subiendo y bajando continuamente. Acto seguido soltaron sin demora su artilleria pesada de temazos cañeros y con estribillo insaciable como «Hysteria», la ya un clásico entre clásicos «Buterflies And Hurricanes», que causó auténtico furor, y la debutante «Map Of The Problematique» que también provocó muy buena reacción entre el público.

Por si este entrante había sentado a poco, las primeras notas de «New Born» saltaron en la palestra y se desató la locura general con este pedazo de temón. Después de tal orgasmo llegó el momento de relajación momentánea con «City Of Delusion», realmente una de las canciones menos interesantes de su último disco, pero antes de que ni siquiera una palabra de decepción pudiese escapar de nuestros labios la distorsión guitarrera de la guitarra de Matt empezó a hilvanar el principio de «Plug-in Baby», la canción favorita del 90% de los asistentes, de modo que sin apenas respirar el concierto pilló un tono álgido que causó auténtica locura colectiva.

Nuevamente tal subidón requirió un momento sosegador que fue «Forced In» (intermedio musical) para volver en la montaña rusa de emociones en la que Muse estaban empeñados en montarnos, con una de sus canciones mas mágicas, cañeras y emblemáticas: «Bliss». Seguidamente el concierto entró en quizás la única parte algo menos estimulante con varios temas de tinte menos movidito, entre las que destacó «Sunburn» por ser una recuperación de su primer disco.

Sin embargo esto no fue más que una vil artimaña para bajarnos la guardia al arrancar lo que con toda seguridad fue el momento más pletórico del concierto: retronó «Supermassive Black Heart» que suena tremendo en directo, no hubo alma sin pegar botes mientras tocaron esta canción, de lo mejor de su último disco sin duda; siguió el nivel ascendente con «Starlight», posiblemente su canción más melosamente pegadiza con la que el público sudó la gota gorda para seguirle el ritmo a palmadas, «Time Is Running Out», muy significativa por su calidad y porque es la canción con la que un montón de gente conoció a la banda, y último broche pre-bises con una «Stockholm Syndrome» que es sin duda uno de sus temones más cañeros y directos.

Después de una breve pausa, volvieron a salir Muse al escenario para tocar la adorada por muchos «Apocalypse Please», a la que le siguió otra recuperación de una vieja gloria de su primer disco «Muscle Museum». A continuación los primeros compases de la grandiosa «Knights of Cydonia» nos hicieron caer en la cuenta de que esto se terminaba, y los últimos momentos de disfrute general transcurrieron en este ambiente psicodélico-progresivo-western que transmite la canción.

En resumidas cuentas, un concierto de 10: show visual absolutamente espectacular, músicos enormes y setlist completísimo, no hay absolutamente nada que reprochar y todos los componentes del concierto cohesionaban al unísono para hacer de la noche del sábado una experiencia inolvidable. De hecho tan grande fue, que me hizo olvidar completamente de que cierta banda llamada Tool acababan de cancelar el concierto de la semana que viene en el mismo recinto.

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28 de octubre de 2006
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