Pasa un año más de música, ya totalmente enclavados en la era del streaming. Cada vez más discos y mayo apertura a nuevos subgéneros que consumir más rápido y la lucha por mantenerse con una oreja en lo que los clásicos tienen aún que decir y otra en las nuevas corrientes (siempre dentro del ámbito personal, no hay que volverse locos). Por el camino se quedaron muchos buenos discos tales como los de Billy Woods, Black Midi, Cult of Luna, Built to Spill, Archers of Loaf, Little Simz, Ashenspire, Chat Pile o Show Me The Body, entre otros. Si no entraron en el top 10 no es porque sean mejores ni peores, sino porque honestamente no me ha dado por escuchar tanto como los que sí están. Y cada vez tengo más claro que escuchar música es un placer, no una destreza. Y por tanto, creo que al mostrar la música que escuchas debe uno ser lo más honesto posible, huyendo del tan condescendiente dar lecciones de buena parte de la prensa musical.
Table of Contents
1. Black Country New Road – Ants From Up There
Cero sorpresas en el top pero todas en el disco cuando salió. El primero era un engorile, el segundo es elegancia pura y el talento de otro mundo se mantiene. Yo que sé, banda mítica ya.
2. Drug Church – Hygiene
Nueva banda fetiche. Jawbreaker meets Black Flag meets Pixies y cada vez con más riffs de estadios. ¿Qué puede salir mal?
3. Cave In – Heavy Pendulum
No es ni top 3 de su discografía pero una vez que entras en él, el disco «metalpaco» de Cave In sigue siendo un melocotonazo brutal con aires de grunge denso y jevilón.
4. Soul Glo – Diaspora Problems
Ya vale con lo de «los nuevos Bad Brains». Estos tíos reinventan el hardcore punk metiendo screamo, rap y trap con toda la mala hostia de ser negro en Estados Unidos. El reverso del buenrollismo de Turnstile.
5. Niños del Cerro – Suave Pendiente
La banda que viene a salvar el indie en español viene de Santiago de Chile. Ecos desde los 90 a Animal Collective, melodías que reptan y temazos que te acarician.
6. Meat wave – Hex
Fresca y abrasiva combinación de ruido cacharrero con melodías casi punk-pop para una de esas bandas que casi seguro nunca saldrá de su nicho, pero que siempre cumple.
7. OFF! – Free LSD
Quién iba a decir que la salida de dos musicazos fuera a propiciar que OFF! se reinventaran con tanto acierto. Free LSD incorpora retazos de jazz, space-rock y hasta black metal a lo que hasta ahora era hardcore 80’s canónico.
8. deathcrash – Return
No sé qué trayectoria tendrán pero traen recuerdos a los primerísimos Mogwai con esos toques slowcore que han ido perdiendo y eso ya me da/me arrebata la vida. Y tienen un tema que se llama «Wrestle With Jimmy», a buen entendedor…
9. Birds In Row – Gris Klein
Un disco de post-hardcore con su mucho de screamo y momentos melódicos muy top. Lo único que no sé es por qué razón un grupo de screamo francés canta en inglés a estas alturas de la peli, ese chovinismo hay que cuidarlo.
10. DITZ – The Great Regression
No son los hijos de Slipknot (aunque esa banda esisten) Estos son noise-rock iconoclasta, salvaje y misterioso desde el sur de UK. Para que luego digan que el brexit no nos iba a traer nada bueno.