Cuando uno se inició con Nirvana en el mundo de la música -no vamos a esconder nuestros colores ahora- y asistió en plena adolescencia al ascenso y la desintegración del espíritu del rock alternativo de los 90 sin que apenas tuviera repercusión en nuestro país, no puede evitar tener una triste imagen de lo que es el panorama musical -o discográfico más bien- de aquí.
15 años después, el hecho de que una banda como Nothink haya podido editar disco en el sello indie Aloud Music no resulta más que un motivo de satisfacción. Y es que la banda, movida por los impulsos creativos de tótems como Nirvana, Sunny Day Real State, Fugazi o Hüsker Dü no es ninguna «next big thing» en el panorama nacional. Más bien al contrario cuentan con un sólido pasado maquetero y de conciertos que les ha permitido hacerse un nombre mucho antes de llegar a grabar este «Bipolar Age».
Así, con rotundidad y las cosas claras, comienza Starting Days With The Right Foot a airear esos retazos de Seattle que obviamente dejaron fuerte poso en el trío. Aunque el tono vitalista del tema nos remitiría no tanto a Nirvana como a los Foo Fighters más desatados, siempre con alguna que otra pirueta instrumental propia de las nuevas bandas de hardcore, algo que sin duda hacen bien en explotar dada la experiencia de Santi García y Xavi Navarro, corresponsables de lo mejorcito en producciones de la vanguardia nacional.
Si tuviéramos que definir las guitarras del disco, los Soundgarden de la última etapa serían una referencia muy recurrida, pero la banda sabe combinar esta rudeza a nivel de riffs con remansos de calma que van hasta Radiohead pasando por Sunny Day Real State y una voz que pasa de rascar como la lija a mostrar registros más frágiles como demuestran magistralmente en Straight On Back.
En Out Of Order podría decirse que oscilan entre Helmet y Queens of the Stone Age sin aclarar mucho. En definitiva, rock alternativo de guitarras poderosas. Mr. Smile incluso recoge una cierta aura a lo Smashing Pumpkins con sus guitarrazos deslizantes. A estas alturas lo que debe quedar claro es que Nothink no son una de esas bandas de post-grunge que se regodean en su propia miseria y la del mundo en general… sus composiciones tienen aire, melodías y ritmos vivos y un buen caso es Adrenaline 500mg. De hecho, apenas le dan a los temas lentos.
Para cuando llega The Shelter ya puede uno llegar a la conclusión de que la banda tiene un estilo propio. Si, pueden citarse referencias aquí y allá, tantas como buenos grupos de rock hubo en los 90, pero es prácticamente imposible que una canción pueda asimilarse por completo al sonido de cierta banda. Better Than Yesterday. Worse Than Tomorrow es un interesante medio tiempo con cierta épica que a nivel instrumental se lleva la palma, alcanzando casi momentos post.
Ese comienzo de Undirectional Race nos remite a destellos de Rage Against The Machine y QOTSA, lo cual no desemboca más que en un gran tema de rock alternativo que combina melodías con grandes riffs. Una de mis favoritas. El crisol de influencias alternativas continúa cuando la disonancia guitarrera de Insiders comienza recordándonos a Muse. Nothink no son una banda presuntuosa y eso es algo que demuestran cada vez que citan su retahíla de influencias, nombres clave que fueron capaces de resucitar el espíritu del rock en la década pasada o continúan haciéndolo. Una lista a la que ellos mismos ya se pueden sumar.
The Right Way parece la balada que, si bien se hace casi necesaria, particularmente no me entusiasma. Esta vena de postgrunge acústico ya ha sido demasiado comercializada por bandas como Bush o Staind y resulta una fórmula un tanto inocua. La banda gana mucho más haciendo temas reflexivos que dejan hueco a las melodías graves, a las atmósferas y a los riffs metálicos de guitarra, como en The Lost & Found Key.
Que Juan Blas, Álex Ferrero y Miguel Peñas no inventan la pólvora con este «Bipolar Age» es algo que queda fuera de toda discusión. Por contra, el trío sabe encender la mecha y hacer explotar todas sus influencias en un artefacto de rock alternativo -y recalco lo de «rock»- que en nuestro país jamás tuvo una fuerte presencia, actualizado con tensión hardcore. Ya iba siendo hora.