Desde que la web comenzó en plan más «serio» un propósito firme era dar cancha a maquetas y tratar de discriminar lo menos posible. La vorágine de discos que llegaban a mis oídos y merecían por importancia mediática o musical ser reseñados ha aplacado durante mucho tiempo este propósito. Por ello me alegro de retomarlo con agrado con la demo de los bilbaínos Liquen.
Liquen se acercan al hardcore desde un punto de vista abierto, que por otro lado, es el que marcan los tiempos. «Bruises» ya lo demuestra, cabalgando entre el medio tiempo con momentos ambientales y otros más intensos en voces y riffs. Algo más melódica y cercana al rock alternativo se muestra «Missing Bullet», posiblemente el «single» -también por su concisión- de esta demo.
En «Oversea» vuelven a demostrar su pasión por los ambientes tintineantes de guitarra y bajo que ponen el sustrato de tensión que anticipa los riffs, mientras que en «Cuento Diferente» se pasan al castellano con una voz más limpia y una moda tan post-hardcore como soltar partes de estrofa en plan recitado. Como suele suceder en estos casos el castellano revela mayor sinceridad, pero también mayor inocencia. Así, apreciamos con mayor facilidad las letras de alineación social.
Aunque hablamos de una maqueta (seis temas), no puede decirse precisamente que pierda fuerza según avanza, más bien al contrario. Así, presentan un mayor toque rockero en «Those Lies», saturado de guitarras, rasgantes e hipnóticas, para rematar con «Drowning», un tema de estribillo pegadizo y tono optimista (pese al título) aunque también melancólico que recuerda a Rival Schools.
Moviéndose en los terrenos del post-hardcore en los que hay esperanza de evolución, el cuarteto gira hacia un post-grunge. Ya sabéis, hoy día es todo post, pero mañana puede ser pre-algo. Reúnen las suficientes dosis de melodía y una cierta aspereza que se equilibran bien, lo cual ya constituye un interesante comienzo, que podría redondearse cuidando más algunas melodías y con mejor producción.