Hella - There's No 666 in Outer Space [2007] reseña

Cuando uno es un auténtico bicho raro en esto de la música suelen darse varias coincidencias, entre ellas: el 50% de la gente que los siga disfrutará con la música y el 50% restante no se molestará ni en oír su nuevo disco pero seguirá diciendo que os adora, la web del grupo tendrá colores chillones y será lo suficientemente críptica para que no seas capaz de ver las fechas del grupo, y la última, la que nos interesa, cuando cambies tu estilo dejarás ser un músico “molón” para pasar a ser un auténtico vendido.

Así que, todo eso lo tienen Hella delante ahora que han decidido cambiar de formación y de sonido, en un acto de valentía mucho más digno que continuar con la formación de guitarra y batería, que más bien parecía que había tocado fondo. Para colmo, van y fichan por Ipecac Recordings, el sello del creador de amores y odios Mike Patton. Algunos se estarán tirando de los pelos.

Ya no son la misma apisonadora que combinaba ruido y experimentación sólo con batería y guitarra, si. Ahora resulta que Spencer Seim y Zach Hill han reclutado a Josh Hill como segundo guitarrista, Carson McWhirter al bajo y a Aaron Ross como cantante en todos los temas. El resultado dista de lo que fueron, pero abre un amplísimo abanico de posibilidades en el sonido de la banda, con un sonido que nos recuerda tanto a The Dillinger Escape Plan, Melvins o Mr Bungle como a The Mars Volta o At The Drive-In. Canciones como la muy The Mars Volta «The Ungrateful Dead», las reminiscencias de The Melvins en «Anarchists Just Wanna Have Fun», el deje Primus (atentos a la similitud en las voces) de «Friends Don’t Let Friends Win» son canciones que por si mismas se merecen que Hella sigan estando en donde están aunque ahora hagan una música mucho mas tangible para todos los mortales.
No hemos dicho lo mejor ni lo peor. Para lo primero, decir que Zach Hill demuestra que está entre los mejores baterías ahora mismo y sobre todo que hay dos temas que brillan por encima del resto. El primero es una especie de revisión del «Desert Search For Techno Allah» de Mr. Bungle como es «Hand That Rocks The Cradle», con esos teclados árabes y esa percusión loca que terminarán de descolocar al oyente. Pero destacar aún mas «Dull Fangs» es claramente obligatorio, ya que es en el tema en que el espíritu de siempre de Hella queda perfectamente unido a una melodía bastante más que aceptable.

Sobre lo peor, estamos ante un disco que a pesar de ser tan rico en sonidos e instrumentos nos suena plano como conjunto, como falto de rodaje… Es probable que la banda aún no sea consciente de la capacidad de sacar algo mucho más allá de cuatro ruidos experimentales. Supongo que será cuestión de que la banda (y no solo Zach y Spencer) eche el resto para la próxima y que crean en sus posibilidades de hacer algo mucho más grande.