Lo que ocurre cuando un artista de cierta trayectoria triunfa repentinamente es que no se sabe muy bien qué esperar. Esto le pasó a Daniel Snaith, músico tras el alias de Caribou, hace unas temporadas con «Swim», un tratado de electrónica pop luminosa y escorada a lo orgánico. Temas como «Odessa» o «Sun» se convirtieron en piezas de lo más codiciado en cualquier festival. Hubiera sido sencillo para el artista producir temas en esa misma parcela para rentabilizar su estatus. Afortunadamente no lo ha hecho y «Our Love» mira con valentía a la electrónica, quizá en un término medio entre los toques más pop de este proyecto y lo explorado con su otro alter ego, Daphni.
«Our Love», un tratado sobre el amor desde diferentes prismas, no propone una ruptura pero sí que se sale un poco del trazado para rebuscar en diferentes texturas electrónicas. Es por ello que se nos puede presentar como un puzzle que va desde el house cabezón de unos Daft Punk que no hubieran perdido el rumbo en «Can’t Do Without You», hasta «Back Home», inmersión en el retrofuturismo a lo Kavinsky. Pero no nos llevemos a engaño, el reciclaje sonoro de «Our Love» siempre mantiene una carga emocional fuerte y si tuviéramos que asociar el disco a un personaje del género, ese sería James Blake, cuya sombra bien podría planear en el ensamblaje ambient-soul-hip-hop de la encantadora «Silver».
Encantador es un adjetivo apropiado para todo un disco que cabalga entre la frialdad sintética y la calidez melódica pero que, en esencia ofrece un puñado de hits en batería, ya sea con la IDM refrescante de «All I Ever Need», con la jungla de colorido ambient de «Dive» o con ese conseguido punto entre John Talabot y Disclosure que es «Our Love». Lo sofisticado y los beats rotundos se dan la mano en esta última entrega de Caribou y así también lo comercial y lo experimental. Lo primero lo evidencia «Second Chance», buscado hit con dulcísima voz r&b sobre un colchón de sintético shoegaze. Lo segundo, la epopeya psicodélica de «Mars» y su obsesivo soniquete.
Quizá por este caleidoscópico juego de equilibrios, Snaith opta por cerrar el disco con «Your Love Will Set You Free», un corte que no hubiera desentonado en «Swim». Con un bajo muy característico y un marcado fraseo pop, se trata de un tema progresivo repuntado por detalles como los arreglos orquestales de Owen Pallett (pieza importante a lo largo del disco) y otros sintetizadores que ponen al disco rumbo a su ocaso.
Todo este dechado de virtudes compositivas se envuelve en una producción exquisita, que nos lleva de la pista de baile a la intimidad de nuestro dormitorio y de vuelta, siempre manteniendo ese equilibrio entre el sonido impactante y los matices sutiles. Una envoltura psicodélica a juego con la portada floral, aunque quizá más amarga que lo que el tema del amor sugiere de primeras. Lo que está claro es que «Our Love» ratifica a Snaith como un maestro de la electrónica más accesible, que no vulgar.