La peor de las sorpresas nos ha llegado con la noticia de la repentina muerte de Mark Lanegan. El cantante y compositor estadounidense nos ha dejado a los 57 años y las causas de su muerte se desconocen. Sin embargo, sí sabemos que Lanegan batalló duramente contra el Covid-19 los últimos meses, pasando mucho tiempo ingresado y llegando a perder el oído. Al parecer, nunca llegó a recuperarse del todo y, relacionado o no con el virus, ha fallecido en su casa de Killarney, Irlanda, donde tenía su residencia fija.
La noticia es aún mayor sorpresa teniendo en cuenta que Lanegan ha estado activo musicalmente hasta el último momento, con colaboraciones en discos de otros artistas, como ya era una constante en los últimos años de su carrera. Una carrera gloriosa tanto para el rock como para el entorno crooner que comenzó con los añorados Screaming Trees, valedores de la rama más psicodélica del grunge, para desarrollarse de forma mucho más descarnada en solitario. Posteriormente, como hemos dicho llegarían colaboraciones ilustres, entre las que cabe destacar sus apariciones en Queens of the Stone Age o con Soulsavers, entre otros.
La maldición de Seattle golpea de nuevo, pero al menos Mark Lanegan se ocupó de que tuviéramos cientos de canciones para recordarle.