entrevista con

«Hemos tratado de no complicar demasiado las ideas»
Trying Wings On Roots fue uno de esos discos que llegó sin hacer ruido, pero cuyos tonos se quedaron grabados en la memoria. Por lo menos en la mía, así que quise saciar mi curiosidad respecto a un giro hacia un rock más clásico, aspecto casual al que ellos no dan demasiada importancia

/Entrevistas///

En primer lugar felicitaros por la mezcla lograda en «Trying Wings On Roots». Y lo digo porque es bastante extraño estar escuchando un sonido tradicional y de repente notar las estructuras quebrarse o esos gritos en segundo plano, etc. Y agradable también, que las canciones pasan sin que uno se de cuenta. ¿Como veis vuestro propio logro?
Estamos muy orgullosos. Sobre todo porque hemos sido capaces de seguir adelante ante ciertas adversidades y eso nos ha hecho más fuertes. De alguna manera también nos hemos dado cuenta de lo que significa el grupo en nuestras vidas. Es la raíz que nos mantiene juntos a los 5, a pesar de la distancia física y las dificultades de tipo logístico que puede plantear. En cuanto al contenido del disco, creo que también refleja la situación que te comentaba. Hemos tratado de mantener y no complicar demasiado las ideas que iban surgiendo, sobre todo en el aspecto de desarrollo y estructuras de la canción. Hemos mantenido estructuras más simples que en discos anteriores, lo que nos ha permitido trabajar más las armonías y la instrumentación.

Vuestra trayectoria arrancó en 2001 en lo que podríamos llamar «el año de los premios». ¿Como recordáis esa época en que aún erais una «promesa»?
La verdad es que parece que fue ayer. “El año de los premios” nos abrió algunas puertas. Pasamos de ser un grupo “maquetero” a un grupo que publica discos (aunque cada vez veo menos diferencias entre el concepto de maqueta y disco), nuestra presencia en los medios aumentó… Fue una época intensa y la disfrutamos mucho, pero en realidad, las cosas no han cambiado demasiado. Sobre todo en lo que respecta a nuestra predisposición o nuestra actitud ante la música, los conciertos etc… Seguimos viviéndolos como si fuera el primero o el último.

Esas cosas siempre suelen desinflarse pero han pasado los años, Audience sigue siendo una realidad (que no es poco) y vuestra música parece ser unánimemente alabada entre quién la escucha, lo que ya es bastante ¿no?
Sí, no nos podemos quejar del trato que hemos tenido en la prensa. A pesar de ello, nosotros no valoramos nuestro trabajo en base a criterios como pueden ser las críticas u opiniones ajenas (que sin duda hay que tener en cuenta, y sin duda animan cuando son positivas). La composición, grabación, y posterior lanzamiento de un disco están llenos de pequeños pasos que son los que nos hacen reflexionar y valorar nuestro trabajo.

El mismo 2001 y a raíz del concurso tocasteis en el FIB. Hoy en día sería un poco raro de veros tocar en dicho festival, pero supongo que tanto en el Primavera Sound como en el Azkena Rock podríais encajar sin problemas. ¿Alguna posibilidad de que caiga fecha en estos festivales?
La verdad es que nos gustaría tocar en los tres, y en muchos más… Espero que los organizadores piensen en nosotros.

En «Trying the Wings on Roots» habéis tirado deliberadamente hacia sonidos más tradicionales. ¿Es responsabilidad del músico ahondar en las raíces de su música (del rock, en este caso)?
Yo creo que no ha sido tan deliberado como dices. La verdad es que nuestros discos no nacen de conceptos preconcebidos o de una reflexión sobre cómo deben ser las canciones. Son las canciones que van surgiendo las que nos inspiran los títulos de los discos. En este sentido el mencionar las raíces es la consecuencia del tipo de canciones que han surgido esta vez. No nos hemos planteado el tirar hacia las raíces como una obligación o una responsabilidad. Eso sí, es increíble lo mucho que pueden llegar a sorprender aún hoy en día.

Hay quién podría tachar de oportunista este giro justo ahora que el rollo «americana» está tan de moda…
Sí, pero nadie lo ha hecho. El otro día comentábamos en el local que en varios artículos nos recuerdan que “alguien podría pensar…”, sin embargo, los que saben de donde venimos y los que conocen nuestra trayectoria saben que no hay nada de ir de ningún rollo.

¿Creéis que habéis encontrado lo que es más o menos el sonido Audience con este disco o aún podemos encontrarnos con un cuarto disco, por ejemplo, más «(post)hardcore»?
Las canciones salen de manera espontánea y creo que es un error tratar de ponerles filtros como pueden ser los estilos. Nosotros concebimos el rock como un espacio muy amplio y abierto donde tienen cabida muchos estilos y donde se unen el riesgo, la diversión o la pasión. Mientras consigamos estas sensaciones mediante la música no importan los estilos.

Supongo que uno de los aspectos más difíciles de este cambio habrá sido el apartado vocal, ya que hasta ahora Audience no era una banda que se centrase mucho en cantar y en las melodías vocales. ¿Me equivoco?
Tienes razón. En este disco hemos trabajado más que nunca el apartado vocal. Cada vez nos sentimos más cómodos cantando y eso nos permite experimentar más con las voces. Todo es cuestión de quitarse la vergüenza.

Aún así hay que decir que el disco sigue siendo primordialmente instrumental y una vez más, rico en este aspecto, también cuantitativamente. ¿Como cuantos instrumentos habréis utilizado en su grabación?
Hemos utilizado batería, bajo, guitarras eléctricas y acústicas, lap-steel guitar, piano, trompeta, violín, hammond, harmónica, acordeón y maracas. A pesar de ello, en directo nos verás utilizar casi todos estos instrumentos (todos menos el acordeón y el hammond, que no tenemos, ojalá…) entre los cinco. Hay muy pocos pasajes del disco que no podamos reproducir entre los cinco en directo.

Vuestro abanico de influencias parece amplio desde el indie-rock hasta el blues y lo que se encuentre por el camino, pero ¿que grupos o solistas están digamos en el altar particular de los miembros de Audience?
Es muy difícil responder a esta pregunta tratando de representar a los cinco… Prefiero dejarlo en vuestra imaginación. Seguro que penséis lo que penséis, acertareis.

Algunos de vosotros sois o habéis sido banda de acompañamiento de Ainara Legardon, otra artista de origen vasco pero que elabora una música 100% americana y de la cual ya esperamos nuevo disco. Supongo que os entenderéis musicalmente a la perfección.
Sí. Con Ainara conectamos enseguida. Ella tenía las cosas bastante claras y nosotros, por encima de todo, queríamos que ella hiciera el disco a su gusto, aportando eso que ella había visto en nosotros. Ella nos guió muy bien y creo que el equipo LeGardon-Audience funciona.

Anari o Julio de la Rosa (El Hombre Burbuja) también se encuentran entre vuestro círculo de amistades musicales… fácilmente tres de los cantautores más personales de este país, ¿no existe esa tendencia entre los miembros de Audience por dar rienda a las visiones personales de cada uno?
Somos unos afortunados por el hecho de que se acuerden de nosotros para sus discos. Respecto a lo de dar rienda suelta a nuestras visiones personales, creo que Audience es el espacio en el que más cómodamente lo hacemos, pero obviamente, no tiene porqué ser el único.

¿Que otras bandas, tanto vascas como españolas consideráis interesantes en estos momentos?
Buff, antes me he librado de la pregunta de los pesos pesados pero ahora parece que no me puedo librar… la verdad es que no estoy muy a la última pero por ejemplo en Euskadi tenemos suerte de contar con gente como Lisabö, Anari, Petti, Inoren ero ni, Pinbol, Akauzazte, Atom Rhumba, Le Noise, Borrokan, Eureka Hot 3,… supongo que no te estoy descubriendo ningún mundo nuevo, no?

Defendéis la cinematográfica como una influencia muy fuerte y en vuestra web incluso enlazáis las de Lynch, Jarmusch, Cronemberg, Wenders… ¿es equiparable a la netamente musical? Estaría bien ver una escena de The Straight Story con la segadora avanzando mientras suena «Farmer» o «Kingdom» de fondo, ¿no creéis?
Sí, por favor. Comentáselo a Lynch a ver qué le parece (je, je).

Pese a Audience, girar con otros proyectos y alguna incursión en lo audiovisual supongo que aún está por cumplir el objetivo de todo músico, que es vivir de esto. ¿O no es una meta que os planteéis?
Es que lo veo muy difícil. Nos conformamos con seguir disfrutando de la música.

En un diario de tirada estatal he leído que os califican como «una banda sobresaliente de onda expansiva limitada», lo que me ha parecido curioso y un poco triste a la vez, aunque tal vez real. ¿Por qué creéis que vuestro alcance es «limitado»?
Yo creo que es porque se aleja de los estándares que marca la industria musical de masas. En el fondo, porque somos un grupo libre y las grandes compañías quieren controlar sus productos. Por eso los fabrican. Muchos de los artistas que triunfan hoy en día no son sino la marca (la cara bonita) de un producto preconcebido. Hoy en día, incluso televisan el proceso en el que convierten a pobres chavales en productos adaptados al mercado de masas. Su ascenso es noticia y mucho más su caída, como la de Ziggy Satardust.

Obviamente el inglés es el idioma que sienta como un guante a lo que hacéis, pero como el riesgo parece ir unido a la banda, ¿no os habéis planteado utilizar más el euskera, que supongo que será de uso cotidiano para vosotros?
Sí, lo hemos pensado. De hecho, ahora mismo estamos trabajando en una canción nueva en euskera. La cuestión es no forzarlo. Que salga.

¿Como fue la grabación del disco? Porque la de «Second Handed» fue bastante rápida, ¿no?
Esta vez ha sido mucho más pausada. Hemos grabado sin la presión del reloj, y eso nos ha permitido probar cosas nuevas en el propio estudio. Además, nos tomamos un pequeño descanso antes de la mezcla para despejarnos un poco. El proceso duró casi todo el verano del 2006 aunque no lo pudimos masterizar hasta marzo del 2007.

Audience siempre se ha caracterizado por directos intensos que consiguen amplificar con éxito la sensaciones que podáis producir en disco. Second Handed era muy directo… ¿no teníais miedo de perder ese «punch» en directo con la vena más tradicionalista de este tercer disco?
La verdad es que no. Estas canciones funcionan muy bien en directo y además siempre hay espacio para las canciones del “second handed” o del “some lovely…”. Creo que en bloque conforman un repertorio muy intenso, desde luego así lo vivimos nosotros.

Una tontada para finalizar. ¿No os sentís un poco paletos tocando «In a Small Town»? ¿En los conciertos al tocar esta canción… hacéis cambio de parejas?
Es que hagamos lo que hagamos, siempre seremos unos paletos.

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