Sin lugar a dudas un recinto como La Cubierta de Leganés no era el más apropiado para ver a una banda como Tool. La verdad que en Festimad tuvo cierta magia eso de que por un trocito de techo se abriera un hueco al cielo mientras todas las luces y pantallas se envolvían con el sonido, pero teníamos claro que en Razzmatazz todo sería distinto.
Vaya si lo fue. Primero se suponía que Isis serian los teloneros con lo cual la alegría iba a ser doble. Los propios Isis emitieron un comunicado en su Blog diciendo que era falsa la gira europea con Tool, pero gracias a la incompetencia de los promotores no supimos si de verdad iban a tocar con Isis, con otro grupo o sin teloneros hasta el momento en que salieron Maynard y cia. Bajón importante, aunque estaba asumido desde casa.
Por otro lado, otro punto de diferencia muy grande: el ambiente. Una cola inmensa que daba la vuelta a toda la sala Razzmatazz de gente con camisetas de Tool, incluso gente de otros países que han venido de fuera solo por ver a Tool en una sala «intima». Entramos a la sala después de tragarnos semejante cola cuando la gente ya estaba nerviosa por ver el concierto.
Nos colocamos por atrás para ver el concierto bien, aunque desde lejos ya que en Festimad lo pudimos ver en segunda fila. Divisamos que el tamaño del escenario de Razzmatazz no era lo suficientemente grande para todo el material del grupo y sacaron tan solo tres pantallas de las cuatro que exhibieron en Madrid. No cabía un alfiler, nadie se movía y sonó la introducción del concierto.
Salieron Adam, Danny y Justin, que empezaron a tocar una especie de improvisación, que terminamos descubriendo que era una versión breve de «Lost Keys». Cuando llegaron al apogeo de la canción, apareció Maynard portando una especie de megáfono con la que atacaron directamente «Rosetta Stoned».
El sonido fue atronador durante toda la minuciosa versión de este largo tema de su último disco, «10,000 Days» que presentaban en esta extensa gira europea. Posteriormente pudimos gozar lo mismo que dos días antes tuvimos como comienzo, dos clásicos de la banda. Primero «Stinkfist» que sacó a todos del letargo inicial de «Rosetta Stoned» y posteriormente una muy coreada «Forty Six & Two».
Uno de los principales motivos por los que este concierto pintaba especial era el ambiente, que desde el primer momento vimos fue muy especial. La expectación creada por la banda en España es inmensa y diría que muchos de los allí presentes se quitaron la espina de la gira anterior por España en 2002, pues la pasión desbordada era increíble en cada tema. Otro de los motivos por los que este concierto debia ser especial era por ver a una banda así de grande actualmente en una sala como Razzmatazz, gozando de buen sonido. Pero esto último no se cumplió, sobre todo en lo que se refiere a los bajos del concierto que sonaron excesivos y nos destrozaron los oídos. Fue quizás lo que mas ennegreció el concierto, ya que era una situación muy molesta para todos.
Siguiendo con el concierto, Tool volvió al «10,000 Days» tras haber pasado por «Aenima», está vez con una muy celebrada «Jambi» con mención especial al solo exactamente clavado al del disco (como ya paso en Festimad). Posteriormente, lo que en principio ocurrió con «Schism» fue que todos chillamos y cantamos, pero en la parte final una vez más nos atraparon con su sonido para terminar rindiendonos a Danny con el increíble final que se marcó. La banda estuvo mas cercana que dos días atrás en Festimad y algo más comunicativa, seguramente debido al buen ambiente que les terminó contagiando mas ganas.
Después tuvimos la variación más importante (aparte del comienzo del concierto) del set list. Si parece ser que han dejado de lado «The Patient» (una de mis canciones favoritas de la banda) en esta gira europea, al menos pude oír una increíble versión de otro de sus temas nuevos, «Right In Two». Tremendos los 4, cada matiz ganaba con creces a la versión del disco. Hasta el bajo de Justin pareció curarse de ese sonido atronador… Después una de las mas celebradas, «Sober». La gente tiene el tema como otro clásico por encima de muchos temas de «Aenima» y «Lateralus» y se nota.
Hicieron un leve parón, se sentaron los 4 a beber agua y saludar para dejarnos ver que estábamos en la recta final. Esto motivo mas a la gente y solo oír el principio de «Lateralus» ya nos puso los pelos de punta. Mágico momento una vez mas, no fue cosa de Festimad lo de no parar de aplaudir al terminar el tema, es simplemente que en temas así te das cuenta que «juegan otra liga » (sonido, ejecución, imágenes de las pantallas).
Aún nos quedó la traca final con «Vicarious» que definitivamente se convertirá en otro de los temas clave del grupo, al menos en la reacción de la gente asi se vio y para cerrar un «Ænima» muy a la altura de «Lateralus» dónde disfrutamos las últimas notas y momentos de magia hasta la próxima (en mi caso, tan solo en un mes).
La gente aplaudió a rabiar, la banda saludo en un gesto bastante amable y sincero, que aparentemente dista mucho de esa prepotencia de la que siempre se les acusa (El tema de perseguir a la gente que hacia fotos por la sala, es a todas luces excesivo). A pesar de la brillantez del concierto, algo me volvió a quedar claro: dieron otra vez un conciertazo de dejarte con la boca abierta pero… nada que ver con la magia de su concierto en Madrid en 2002. Y es que la situación parece clara, el grupo hace un concierto increíblemente brillante sin dar el 100% y después de que Maynard dijera que volverían en Otoño, me queda la esperanza de que esto no fue más que un aperitivo exquisito de un manjar por llegar. Aún así, la gente se fue muy contenta y pensando que ya podían decir aquello de «Yo vi a Tool».