Durante un total de tres días pasando con el coche por delante de un cartel del concierto de Sindicato del Crimen para terminar descifrando que ni se trataba de un poster antiguo ni de un anuncio de cualquier otra cosa distinta de un concierto. Si, la banda de Terry I.D. por fín actuaba en Madrid para presentar su reciente trabajo «XYY», disco que no pasará entre lo mejor de un género ya defenestrado, pero que sin proponerse mucho consigue sacarnos a pasear por el habitual oscuro terreno del grupo.
Una de las cosas que más llamaba la atención era que nada más entrar nos brindaron un vídeo grabado en torno a los «hombres topo» que trabajan con tuneladoras haciendo túneles, con el propio Terry entre los implicados. Es curioso, pero cuando Sindicato del Crimen se formara con Beastie Boys como banda a seguir, sus letras siempre hacían mención al mundillo de la explotación laboral en las obras, y parece que la cosa no ha cambiado tanto después de tantos y tantos años.
El propio Terry demostró que sigue en forma y que sigue cosechando el cariño de la gente, con especial mención a todos los temas de «¡Que Aproveche!» y «Ghetto Paradise», claro. Porque aunque «XYY» suena compacto y fuerte, no aporta esa frescura y experimentación que en su día supusieron las otras dos obras. La ejecución en temas como «Deportivo VIH» o «Estación Futura Invertebrada» fue buena, pero no dejan de ser temas de metal correctos sin más.
Cuando sonaron las piezas claves de su repertorio, la cosa fue una verdadera olla a presión. Es cierto que también en estos temas se ha perdido el aire urbano-oscuro que traía el legado hip hop de la propia banda, pero por contra ganan en una pegada sensacional. David a las guitarras es un seguro de vida, ya sea haciendo eso o tirando de un apartado algo más de ritmo en temas como «Ciudad Rayada» o «Ghetto Paradise». Igualmente, el fichaje del ex-Def Con Dos Juanito Sangre para la réplica a Terry es todo un acierto.
El gran momento se vivió con «Presión de Sien», esa historia de drogas en clave de rap que todos coreamos. El contrapunto lo vivimos con «Juana», que en su versión 2011 y con uno de los antiguos MC’s del grupo no llegó a la altura.
En definitiva, una lección de Terry de amor por lo que hacía y de muchas pelotas.