Tres tíos sentados, esa es la autodenominación que los propios My Own Private Alaska (MOPA, a partir de ahora en esta crónica) eligen para presentarse. Originales en eso, pero aún más a la hora de hablar de un combo que mezcla screamo con piano y batería.
Antes, una banda de aquí que directamente consideramos más interesantes, sin ser una propuesta tan rompedora y novedosa como la de MOPA. Jardín De La Croix sigue avanzando paso a paso con su propuesta progresiva, con un concierto que no varió apenas con su última actuación con Toundra en esta misma sala. Si como novedad vale que hayan incluido como fondo del set una televisión con una película porno de los años 50, si que las hubo. Un gusto verlos mover los dedos en las cuerdas, siempre.
Con MOPA desde luego que la cosa fue mucho más novedosa, aunque ya fuera sólo por tener un planteamiento tan exclusivo. No ayudó, pero nada, que la batería se oyera mucho más que el resto de instrumentos, justo teniendo en cuenta que hablamos de un instrumento como el piano, claramente indefenso ante la vigorosidad de las otras dos partes.
La voz estuvo también algo bajita, pero claro, salía perfectamente de la quema. Su cantante es sin duda un excelente cantante, gritando sin forzar en absoluto y cantando cuando la ocasión requería. Aunque es inevitable acordarse de que la propuesta sin gritas es muy interesante y recomendable, de hecho, mucho mejor estuvo en la versión magnífica (entre romántica y oscura) de «Where Did You Sleep Last Night?» que también hizo Nirvana . En temas propios como «Die For Me» o en alguna pieza nueva la cosa flaqueo mas, pero ante «Ego Zero» pocas pegas se pueden poner, la verdad.
La sala presentaba inmejorable aspecto con un aparente lleno desde las primeras filas, pero ellos a los 45 minutos se fueron dejando solamente lo justo, habiendo momentos del EP que un servidor no recuerda haber oído. Una pena, por qué un buen remate final hubiera machacado la actuación, llevándola a otra nota mas alta.
