Nothink y Hedtrip tienen muchas cosas en común: ambas pertenecen al sello Aloud, tienen un ritmo de lanzamiento de discos parecido, son dos de los grupos mas aclamados del panorama nacional, y ambas de un modo genuino tienen un sonido muy internacional, que deja en calzoncillos a muchos de sus homólogos que tienen la suerte de encontrarse en otra zona geográfica mas de moda.
No es de extrañar entonces que en alguna otra ocasión ya hayan llevado a cabo conciertos conjuntos, aunque en el caso del pasado día 17 se giraron las tornas: fueron Nothink los encargados de telonear a Hedtrip; no terminé de entender muy bien a que se debía ya que los primeros tienen bastante mas proyección popular a día de hoy, aunque quizás los organizadores pensaron que por el hecho de que Hedtrip sean Barceloneses aumentaría su gancho.
El caso es que con un retraso considerable salieron los madrileños Nothink a escena (lo que junto con el cartel invertido hizo aumentar mis sospechas de que Hedtrip hubiesen cancelado); con los mismos dos temas que dan introducción a su gran último disco que es Spotlights.
Disco que siguió teniendo un protagonismo total en su setlist, de hecho la aparición de canciones de Bipolar Age fue bastante anecdótica; aunque el público fiel demostró su calidez recibiéndolas con las mismas ganas. No es que haya para quejarse, pues claramente con Spotlights el grupo se superó totalmente a si mismo sobre un debut que ya de por sí era totalmente arrollador; pero si dejamos aflorar la vena perfeccionista, dolió que cancionazas de Bipolar Age como Straight on Back se quedasen en el tintero.
A pesar de esto, Nothink pudieron con todo: como es de esperar después de oírlos en disco su directo no desmerece en absoluto y transmite a la perfección su rock intenso y vibrante, asombroso teniendo en cuenta que el power trio sólo dispone de Juan Blas para interpretar las voces y todos los matices de guitarra el sólo; inclusó encontró tiempo para bromear con el público y lanzar agradecimientos por doquier.
En resumen una actuación notablemente intensa, sacando su mejor artillería pesada especialmente remarcable con canciones como Crows of Tragedy St. o Kill!! Kill!! Genocide, aunque en todo momento manteniendo el listón elevado, con un broche final en forma de dos canciones de su primer disco, para demostrar que no lo tienen olvidado del todo.
A punto estaba de irme de la sala convencido de que Hedtrip no ivan a tocar ya, cuando comprobé que el comportamiento de los técnicos iba encaminado hacia la presencia de otro grupo en la sala; mi primera reacción fue pensar que quizás se les quedaría grande hacer de plato fuerte después de Nothink, pero nada más lejos de la realidad.
Divertidos, dinámicos y contundentes, Hedtrip desataron toda su potencia en lo que pareció ser una extensión de la tendencia palpable en Roma, su último disco, donde dan un émfasis notable hacia melodías del ‘post-hardcore’ de tendencias británicas, bailable y con estribillos pop la mar de coreables.
Sin embargo llevaron al extremo esta actitud divertida, personificada en su bajista Raúl Martínez, que con sus continuos balanceos frenéticos y sus constantes giños al público, consiguió levantar con éxito el ambiente de euforia.
Acorde con su actitud en escena también arrancaron con la eficaz Give it to Me, que fue el preámbulo de un recital dónde decidieron dar evidente protagonismo a las canciones de su último disco, que con la potencia del directo ganaron muchos enteros. Personalmente Roma me parece un disco bastante bueno, pero realmente para sentir a los Hedtrip de éste disco hay que disfrutarlos en directo, como demostraron.
Por fortuna hubo concesiones a About Useless Needs, anterior disco de la banda, recuperando entre algunas otras a Jack Attack, una de sus canciones más alabadas; aunque su primer disco sí que lo dejaron definitivamente arrinconado.
En ningún momento se fueron calentando Hedtrip o bajaron el ritmo siquiera: entraron a saco, siguieron a saco, y terminaron a saco. Dando botes continuamente y pegando acelerones del ritmo prefijado de las canciones; en éste sentido demostraron tener mucha más soltura que Nothink en directo (que estuvieron algo estáticos), con Hedtrip toda La [2] se convirtió en un condensador de saltos y animación.
Ante la satisfacción del público el grupo consiguió arrancarle unos minutos adicionales a la hora de cierre del escenario para tocar un par de bises adicionales, entre los que se contó la única canción que tocaron de su primer disco y con la que cerraron el concierto: Oxygen.
En conjunto un concierto espléndido: dos bandas parecidas a su manera pero distintas por otro lado pusieron sus mejores cartas sobre la mesa; asistiendo a conciertos así se es capaz de devolver la fe en el futuro del panorama del rock nacional a cualquier descreído.