Hace unas semanas que BCore, dentro de su campaña hashtageada como #pagaloquequieras, liberaba su catálogo. Se trata de una actualización de un sello mítico a una nueva filosofía. A nosotros, casi tan «míticos», nos hizo sentirnos algo mayores el ver que podíamos bajarnos esos viejos discos de Standstill o Aina que tanto nos marcaron. No voy a hablar aquí de ellos, ni de No More Lies, ni de Delorean, ni de todos esos «discos estrella» del sello sobre cuyas virtudes ya casi todos han hablado.
Al contrario, esta iniciativa me ha hecho reparar entre su bandcamp en esos patitos feos de BCore, una caprichosa y casual selección de discos que no hicieron demasiado ruido, quizá porque esa era su naturaleza, quizá porque no engancharon con ninguna moda, o porque la trayectoria de la banda en cuestión no fue del todo estable. Gracias a los tiempos modernos, podemos disfrutar, descubriendo o redescubriendo, de algunas de estas joyas ocultas de la corona de nuestro indie.
All Ill – Symbols of Involution
Hace ya tiempo que Bcore es conocido como un sello de rock alternativo más que como algo que obedezca, estilísticamente, a los cánones del hardcore o el post-hardcore, géneros que sin duda vieron al sello nacer. Pero hubo días en que los sonidos agresivos mandaban. De entonces son All Ill y su segundo disco «Symbols of Involution», que proponía un hardcore metalizado y técnico con querencia al grindcore. Disco de culto para los amantes del género que sin embargo queda un poco oculto para el aficionado medio al sello.
http://bcoredisc.bandcamp.com/album/symbols-of-involution
Cobolt – Passöa
Otros en la escudería defenderían el llamado emo, desde diferentes vertientes. El preciosismo de Maple o la épica de Madee fueron dos claros ejemplos sin salir de Barcelona. Angustiados y filosóficos, los suecos Cobolt (con gente de Refused a bordo) se enfocaban a la desolación slowcore, una estructura de canciones lentas, agónicas, que pese a introducir voces sensibles y cristalinas sitúan en las antípodas del pop. Canciones para escuchar a solas en un entorno decadente y quizás sacar algo positivo de tanta mierda.
http://bcoredisc.bandcamp.com/album/pass-a
Estrategia Lo Capto! – Gran Bola de Nieve
Betunizer se han llevado toda la fama de la rama valenciana cacharrera de Bcore. Y bien merecida además. Pero a su sombra ha quedado el noise-garaje-surf de Estrategia Lo Capto!, en la que también militan los hermanos Junquera (Betunizer, Negro). Jolgorio ruidoso, mayormente instrumental e indisciplinado, un revoltijo de post-punk, post-hardcore e indie-rock (Wipers, Minutemen, The Ex…) que podríamos encuadrar dentro del freak-noise, etiqueta que si no existe me la invento.
http://bcoredisc.bandcamp.com/album/gran-bola-de-nieve
Familea Miranda – Dramones
La de estos chilenos afincados en Barcelona es una de esas propuestas que sacan los colores a cualquiera que trate de diseccionar la música. Post-rock, noise, math y free-jazz son cromos fácilmente intercambiables para definir la informe masa sónica de este trío, underground por definición. La digestión no es fácil, pero se trata cuando menos de música estimulante para el oyente experimentado.
http://bcoredisc.bandcamp.com/album/dramones
Coconot – Cosa Astral
Algunos ya estarán pensando que menudo descubrimiento voy a hacer con esta aventura previa de Pablo Díaz-Reixa. En mi débil defensa decir que «Novo Tropicalismo Errado» no estaba en el bandcamp. Sea como sea, Coconot es un proyecto que ha quedado a la sombra de la trayectoria de El Guincho de forma totalmente injusta. Por lo menos a mí me gusta mucho más y como el artículo es mío, ya se sabe el dicho. Esos vestigios del punk y el rock otorgaron a su psicodelia tropicalista unas aristas de las que no ha vuelto a hacer gala, por muy bien que haya fusionado después el pop con las raíces. Y qué narices, que «La Verbena de los Delfines» continúa siendo uno de los temas más sabrosones de su repertorio.
http://bcoredisc.bandcamp.com/album/cosa-astral
eh! – El Sobresalto Alpha
Como directamente de la trayectoria de eh! (sobrenombre de Elías Egido, al que conoceríamos en primer lugar por su tiempo en Standstill) se aprovecha todo, como del cerdo, qué mejor que quedarse en su aún reciente tercer álbum y de paso tomamos el pulso a la actualidad de Bcore. En él y junto a una extensa banda de secuaces, continúa redefiniendo el post-rock a su gusto, toda una lección de transmitir emociones con instrumentos clásicos y sabores de jazz. Piano, saxo o cello hacen de motor de una música evocadora y cinematográfica, esta vez con más luz y peso orgánico.
http://bcoredisc.bandcamp.com/album/el-sobresalto-alpha
Y nada más, animar a la gente a que se acerque a estas y otras referencias no tan típicas y al sello felicitarle por la trayectoria y abusar un poco, pidiéndole que haga por rellenar los huecos que faltan, aunque sólo sea en modo escucha. Y es que echamos de menos en su bandcamp algún que otro disco de G.A.S. Drummers, Lavodrama, Margarita, Nisei, Half Foot Outside, The Lions Constellation, Qualude, Zeidun… Por no hablar de sus primeros tiempos y Corn Flakes, Subterranean Kids, Xmilk, 24 Ideas… ¡uff!